Arte balear en Galicia al rescate de las ‘sargantanes’ de Ibiza

El arte contemporáneo de las Balears y las Podarcis pityusensis son los protagonistas de la exposición colectiva ‘Sargantanes’, que se puede contemplar hasta el 18 de noviembre en Faro Vilán, en la localidad gallega de Camariñas.

La muestra itinerante, promovida por la asociación Art amb B y comisariada por Antoni Torres Martorell, arrancó el pasado 9 y 10 de septiembre en el municipio mallorquín de Algaida, en el marco de Algaidart, y desde el pasado 30 de septiembre se encuentra en Galicia, en la emblemática sala de exposiciones ubicada en el interior del faro de Cabo Vilán. El lugar es muy conocido entre los voluntarios baleares que ayudaron a limpiar esta zona de chapapote tras la catástrofe del Prestige.

Como explica su comisario, el proyecto nace con la voluntad no sólo de promover a los artistas de las islas y de otros rincones del Mediterráneo sino también de concienciar a la población de la importancia de preservar nuestro entorno natural y proteger las especies autóctonas, en este caso, las lagartijas ibicencas, en peligro de extinción a causa de las serpientes que infestan desde hace años Ibiza.

Para la muestra de Camariñas se ha hecho una selección de 32 obras, piezas de hierro en forma de sargantanes intervenidas por artistas, la mayoría de Balears, pero también de otras zonas del Mediterráneo y de Galicia, que cuenta con una representante, Puri Lema del Río.

Entre el listado de creadores que participan se encuentran Álvaro Mendoza, Enric Riera y Mar Ample, los tres de Formentera; además de Ángel Zabala, Anthony Gofer, Aida Miró, Fina Torres, Juan Gascón, Yoa Covas, Diana Bustamante, Aphon, Begoña Gorrotxategi, Carmen Liberal, Doralice Souza, Marga Juan, Marga Guasch, María Vila, Matilde Hernández, Miguel Ángel García, Patricia Boned y Toni Marí Tirurit, todos ellos de Ibiza.

El comisario de la muestra adelanta que en el catálogo, que se publicará a finales de año, y en las próximas exposiciones de ‘Sargantanes’ se incluirán imágenes de Sebastián Candela, un apasionado de la fotografía con miles de fotos de lagartijas ibicencas.