Ocho criadores de la Asociación de Ornitología Deportiva pitiusa expusieron en el Sant Antoni Rural un centenar de pájaros, la mayoría canarios, diamantes de Gould y bichenovs. Cuentan con 32 miembros, pero casi todos están ahora enfrascados en la cría (cebándolos de vitaminas para que estén más fuertes), según explicó Óscar Pla, su presidente y primer criador ibicenco de meringuer, un cruce de agi que a simple vista parece un canario que acaba de despertarse de una noche de juerga. Pla lleva 25 años en la canicultura. Vicent Bonet, que lleva 30 años, ahora ha empezado a criar exóticas codornices chinas. Lo tiene complicado, según asegura, porque no hay ninguna empresa de mensajería que transporte ese tipo de aves entre Eivissa y la Península o Mallorca. Si quiere comprar o vender una, debe desplazarse desde la isla al continente, lo cual lo complica todo y, especialmente, encarece los costes. Tiene que recurrir a compañeros de la asociación para algunas adquisiciones o ventas.