El Cor Ciutat d'Eivissa, la Capella Mallorquina y la Orquestra Clàssica de Mallorca interpretaron ayer el Réquiem de Verdi en la catedral de Ibiza. Las formaciones corales contaron con solistas de primer nivel internacional, como la soprano Carmen Solís, la mezzosoprano María Luisa Corbacho, el tenor Gustavo Peña y el barítono Armando Piña. Miguel San Miguel Fuster dirigió el coro, que recientemente ha sido galardonado con el Premi Ramón Llull del Govern, mientras que la dirección artística y musical corrieron a cargo de José María Moreno Valiente.
