Una veintena de maletas reposaban ayer en un recoveco del centro cultural de Sant Carles. ¿El motivo? La vigésimo segunda edición del concurso Internacional de Piano de Ibiza. 68 concursantes de 24 nacionalidades distintas aterrizaron ayer en la isla con el propósito de participar por primera vez, o una vez más, en el concurso que celebra este año su 30 aniversario.

Jóvenes pianistas de numerosas partes del mundo: desde Rusia hasta Argentina, desde Taiwán hasta Sudáfrica, pasando por Corea del Sur, Ucrania y múltiples ciudades de España, visitan la isla para embelesar con su talento musical a los ocho miembros del jurado,entre los que se encuentran personalidades del piano como la eslovaca Tatiana Franova, Antonio Baciero o Mary Wu.

«Esta competición es un de las más importantes del mundo y en un sitio tan pequeño», aseguró María Ángeles Ferrer, organizadora del concurso, antes de iniciar el sorteo que indicaría el orden de participación de los pianistas y«si tendrán más o menos vacaciones en la isla».

El concurso se celebrará durante toda la semana en el centro cultural de Sant Carles. Sin embargo, los alumnos ensayarán todos los días desde las 8 de la mañana hasta las 21 horas en casas payesas de familias que poseen un piano y que llevan años colaborando con el concurso de forma altruista. «Además, les ofrecen 'coca cola' y orelletes, aunque en muchos casos se entienden en con tan sólo dos palabras: toilette y piano. Son familias de la isla que sólo saben ibicenco y castellano, nada de inglés», rió Ferrer. Los organizadores del concurso se encargan de transportar durante esta semana a los participantes entre el hotel en el que se alojan, Sant Carles y las casas particulares.

Además, Ferrer mostró unas palabras de agradecimiento a los colaboradores del concurso, que obsequiaron a los participantes con unos regalos para darles la bienvenida. «Ibiza es muy conocida por ser una potencia turística, pero esta semana ha de serlo por este concurso de piano», apuntó Vicente Torres, director general de Turismo del Govern.

«No es fácil ganar», declaraba María Linares, participante del concurso. Sin embargo, ningún concursante se declaraba nervioso, ya que en la isla el ambiente de competición es «muy amigable». Los jóvenes pianistas habrán de tocar una composición de Bach de forma obligatoria, una sonata a elección de cada uno y un tema libre con el que impresionar al jurado. Los resultados se conocerán el domingo a las 22 horas, «aquí en España es una hora normal», bromeó Ferrer. La Asociación de Vecinos de Sant Carles agasajó al final de la presentación a los pianistas con productos típicos de la isla.