El Consell de Ibiza ha ordenado a la empresa que gestiona el vertedero insular, la UTE Giref, trasladar a Valencia por vía marítima los lodos fecales que generen las plantas depuradoras ibicencas y que no vayan a ser usados con fines agrícolas en la isla. El primero de los barcos zarpó anteayer por la noche del puerto de Ibiza con un cargamento de 50 toneladas de fangos, que serán usados en la Península en labores relacionadas con la agricultura. La operación ya no se interrumpirá durante todo el verano, puesto que está previsto que se envíe a Valencia un promedio de 50 toneladas diarias de este material, que ocasiona múltiples problemas en la isla y que no ha sido posible finalmente depositar en el vertedero de Ca na Putxa por problemas jurídicos, pues no pueden guardarse allí de forma permanente, informó el Consell.

El conseller insular de Medio Ambiente, Miguel Vericad, autor material de la orden transmitida a los gestores del vertedero, explicó ayer a los periodistas que se trata de una medida necesaria ante la «extrema urgencia» de la situación de las depuradoras de la isla, incapaces de absorber las necesidades de los más de 300.000 habitantes que hay en la isla en verano. «En verano, nuestro sistema de depuradoras está prácticamente caído», recordó Vericad. Mientras no se disponga de las nuevas depuradoras proyectadas, «era necesario tomar decisiones», agregó.

En total, está previsto que cada año se evacúe un total de 8.000 toneladas de residuos fecales hacia Valencia, desde todas las depuradoras de la isla. Será la UTE Giref la que se ocupe de efectuar el traslado en camión hasta el puerto, mientras que el pago de los elevados costes de la operación -800.000 euros- correrá a cargo del Govern. En concreto, se harán cargo de esta cantidad la empresa pública Abaqua y la dirección general de Recursos Hídricos. Según informaron fuentes del Consell, el Govern -propietario de las depuradoras de la isla- se resistió hasta el último momento a pagar este traslado, pero finalmente ha accedido a ello.

Usos agrícolas

El Consell destacó la alta calidad de los lodos de las depuradoras ibicencas para su uso en cultivos en la Península: «No tienen residuos industriales ni materiales pesados y son óptimos para uso agrario», señaló.

De hecho, la conselleria de Medio Ambiente advirtió de que, pese a la operación de traslado marítimo, «se mantiene en funcionamiento la línea de aprovechamiento agrícola de los lodos en la propia isla». El conseller Vericad recordó que dos técnicos agrícolas del Consell asesoran a los payeses para que puedan hacer uso de los lodos minimizando molestias «y con garantías de seguridad ambiental». «En paralelo, el Consell seguirá colaborando con los ayuntamientos para hacer confinamientos de lodos con restos de poda», añadió.

Vericad señaló que confía en que el problema de los lodos «se pueda resolver de aquí a tres años, cuando finalice la construcción de la planta de triaje que se ubicará en el vertedero de Ca na Putxa». «Mientras tanto, era necesario tomar decisiones y encontrar un remedio a un problema gravísimo. Lo que no se podía hacer era hacer lo que se ha hecho hasta ahora: esconder la cabeza bajo el ala y dejar que pasara el tiempo, porque entonces los problemas no se solucionan, sino que se hacen más grandes», añadió el conseller insular de Medio Ambiente.