El ´Prince Abdulaziz´, uno de los yates más lujosos del mundo, navega desde hace unos días en aguas pitiusas. Los imponentes 147 metros de eslora del barco, propiedad del Rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdelaziz, han estado amarrados estos días en un pantalán del puerto de Vila, enfrente del monumento a los Corsarios, para deleite de los turistas y residentes de la zona, que se pueden acercar a observar el sexto megayate más grande del planeta, según la clasificación de la web megaricos.com.

Estos dos últimos días el recorrido de la embarcación ha sido el mismo, desde Ibiza a Formentera, con parada y fondeo frente al islote de s´Espalmador.

El ´Prince Abdulaziz´ fue construido en 1984 en Dinamarca. Tras la muerte del rey Fahd, fue heredado por su sucesor, Abdalá bin Abdelaziz.

Está equipado con helipuerto, dos potentes motores diesel, su velocidad de crucero es de 18 nudos, aunque puede alcanzar los 22, y tiene una tripulación de en torno a 66 personas.

El yate del rey de Arabia Saudí llega a la isla pocos días después de que zarpase de Vila el ´Topaz´, que el año pasado estaba entre los seis primeros en la clasificación de los megayates más grandes del mundo de megaricos.com. El ruido provocado por las fiestas a bordo provocó las quejas de los vecinos de es Puig des Molins.