La consellera insular de Territorio y Movilidad, Pepa Marí, destacó que, aparte del resultado del plan de choque del intrusismo, la puesta en marcha del sistema de GPS, pese a que no ha funcionado al cien por cien, ha aumentado la eficacia del taxi. Se han llegado a registrar hasta 22.000 llamadas en un solo día, resaltó Marí. Además, este verano han operado 97 licencias estacionales más. Pero no es suficiente para atender la demanda. De hecho, el conseller balear de Territorio y Movilidad, Marc Pons, subrayó que «no sólo con inspecciones se solucionará el problema del intrusismo y los taxis pirata». Así, a modo de «reflexión y opinión», Pons apuntó la necesidad de «ampliar la oferta de licencias temporales para que la oferta se ajuste a la demanda», aunque compete al Consell. En todo caso, el conseller dijo que próximamente se iniciará la tramitación de la nueva ley balear de transportes, en la que se puede incorporar alguna medida consensuada con los consells, para combatir el intrusismo.