El primer curso práctico de conservación de metales de procedencia subacuática comenzó ayer en Formentera con 16 especialistas, todos conservadores-restauradores (tanto del sector público como del privado), que durante cuatro días profundizarán en sus conocimientos sobre cómo abordar el tratamiento de los objetos metálicos de valor arqueológico y patrimonial relacionados con pecios.

El objetivo es dotar a los alumnos de una visión completa del papel de un conservador en una intervención arqueológica subacuática. Esto implica la evaluación in situ del estado de conservación de los elementos metálicos, pasando por la fase de extracción hasta llegar a las técnicas de conservación en laboratorio.

El curso está organizado por el área de Cultura y Patrimonio del Consell de Formentera y por el Institut Balear d´Estudis en Arqueologia Marítima (Ibeam), que trabaja en la elaboración de la carta arqueológica subacuática de Formentera desde 2015. Además de labores de investigación, el programa también incluye actividades de divulgación y de formación como la que comenzó ayer.

El director de proyectos del Ibeam, Javier Rodríguez, junto con la consellera de Cultura, Susana Labrador, y Guillermo González, coordinador del curso, presentaron ayer los objetivos a los participantes.

Rodríguez recordó que a medida que han ido investigando pecios en aguas de Formentera se han visto en la necesidad de contar con «conservadores-restauradores especializados no solo en el tratamiento de estos objetos cuando salen del agua, sino en el diagnóstico y estado de conservación in situ de este patrimonio». La importancia de esta especialización radica, según este especialista, en tomar la decisión adecuada en cada caso, «si se saca o no se saca el objeto, de qué manera hay que sacarlo y cómo hay que transportarlo».

Por todo ello, el curso es eminentemente práctico para que los participantes puedan «aplicar las técnicas que van a aprender en sus actividades profesionales», agregó Rodríguez.

Como profesores especializados el curso cuenta con la presencia de Jean-Bernard Memet, doctor en Corrosión, uno de los expertos mundiales en esta materia y consultor de la Unesco. También está la conservadora-restauradora Victoria Folgueira, una de las especialistas nacionales más reconocidas en conservación de metales de origen subacuático.

Javier Rodríguez detalló que el curso es «eminentemente práctico, con algo de teoría para hacer talleres en los que los alumnos aprendan a crear las herramientas para tratar este material y luego cómo realizar los tratamientos». De hecho, el Museo Arqueológico de Ibiza y Formentera ha facilitado material metálico de procedencia submarina para que los participantes puedan trabajar directamente con él. Estos talleres se realizan en la sala anexa al albergue de la zona escolar de Sant Francesc, donde se alojan los alumnos.

Está previsto que la práctica se realice en el pecio de un barco del siglo XVIII, denominado es Cap I.

Se trata de los restos de una embarcación hundida en la costa suroeste, de la que se conservan los restos metálicos (artillería, munición, aparejos). En este caso, el curso también cuenta con la colaboración del centro de buceo Vellmarí y con el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil.