DENUNCIA DE CSIF

MUFACE: menos médicos, clínicas y hospitales para atender a los funcionarios

Cada vez son menos las aseguradoras que participan en las convocatorias de los contratos públicos del servicio por la infrafinanciación que se viene produciendo, asegura CSIF

Concentración de funcionarios ante MUFACE.

Concentración de funcionarios ante MUFACE. / EPE

Nieves Salinas

Momento clave para el mutualismo. Hace apenas unos días las aseguradoras -Asisa, Adeslas y DKV-, que forman parte del actual concierto de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (MUFACE), aseguraban a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, que, en las condiciones actuales, no podrán continuar y que acumulan pérdidas que ya superan los 200 millones de euros. Este lunes, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) vuelve a pedir "una mayor dotación presupuestaria para que los servicios sanitarios que se prestan a los mutualistas y sus beneficiarios no se vean afectados".

Durante el actual concierto sanitario, dice el sindicato, se ha visto "como se ha reducido el número de médicos, clínicas, hospitales y profesionales que atienden al colectivo de mutualistas". Incidencias que CSIF "ha detectado y denunciado" a las distintas mutualidades.

"Cada vez son menos las entidades de seguro que participan en las convocatorias de estos contratos públicos del servicio, fruto de la infrafinanciación que en este ámbito se viene produciendo", insiste CSIF que, además, muestra su preocupación: el mutualismo administrativo presta asistencia sanitaria a más de dos millones y medio de personas y "su desaparición supondría el colapso de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS) ya saturado y un alto coste económico para las arcas públicas".

Recortes desde 2010

Desde CSIF aseguran que van a seguir trabajando para que la atención sanitaria que reciben los funcionarios del Estado se presten "en las condiciones idóneas, previas a todos los recortes producidos desde 2010". El sindicato solicita "una mejora de la financiación para asegurar su permanencia y restablecer la calidad de los servicios" por lo que insta al Gobierno "a favorecer los medios necesarios y a la Abogacía del Estado a establecer los cauces para poder incrementar la financiación del concierto actual para paliar las dificultades a las que se ha debido hacer frente, tras la situación económica mundial- Guerra de Ucrania- y la economía del país".

En este 2024 comenzará la negociación del nuevo concierto para los próximos años

El 1 de enero de 2022 entraron en vigor los nuevos conciertos sanitarios que, en el trienio 2022-2024, garantizan la cobertura sanitaria a través de Asisa, Adeslas y DKV tanto a los funcionarios que prestan su servicio en España como a los destinados en ciento veintitrés países. En este 2024 comenzará la negociación del nuevo concierto para los próximos años. La renovación se tendría que firmar, como tarde, en septiembre de este año, para que el concierto arranque el 1 de enero del 2025.

CSIF señala que la negociación del próximo concierto se iniciará de "manera inminente" y podría estar cerrada para el mes de abril, aproximadamente. Desde la organización sindical han solicitado una reunión a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) para les ofrezca información sobre la viabilidad del sistema.

El futuro del modelo

Una reunión que ya han mantenido con el organismo las aseguradoras que forman parte del actual concierto para elaborar el estudio que el Gobierno encargó en 2022 a esta entidad sobre la financiación del modelo. El estudio de la AIReF evaluando esa eficiencia económica del mutualismo se haría público de cara a septiembre, pero las aseguradoras consideran que si no está listo en junio -como se ha dicho, el nuevo concierto debería estar firmado como tarde en septiembre de 2024- no será de utilidad, porque a lo mejor, cuando se publique, ya no existe MUFACE.

La preocupación entre las aseguradoras por una posible quiebra del modelo se acentuó cuando, en los últimos meses, planeó su hipotética desaparición

La preocupación entre las aseguradoras por una posible quiebra del modelo se acentuó cuando, en los últimos meses, planeó su hipotética desaparición, ya que Sumar incluyó en su programa para las elecciones generales del 23 de julio sacar a los funcionarios del mutualismo administrativo de forma "paulatina" para incluirlos, junto al resto de la ciudadanía, en el sistema sanitario público.

Con el inicio de año, MUFACE dejó de estar bajo el paraguas del Ministerio de Hacienda y pasó a estar vinculado al Ministerio de Transformación Digital y de la Función Pública, que dirige José Luis Escrivá. El cambio "de dependencia orgánica no tiene ninguna consecuencia para los mutualistas, como ha ocurrido en anteriores ocasiones", indicaban desde este departamento a este diario. Los retos, los mismos: dotar a la entidad de mayor financiación para garantizar la asistencia sanitaria de los funcionarios, como piden sindicatos y aseguradoras.