Una iniciativa de la ONU ayuda a las empresas de Ibiza en su lucha contra el plástico

IbizaPreservation anima a los negocios a integrarse en la Iniciativa Mundial de Turismo y Plástico, un programa que ayuda a las empresas en sus planes de circularidad

La coordinadora de Plastic Free Ibiza y Formentera, Ayelén Alonso.

La coordinadora de Plastic Free Ibiza y Formentera, Ayelén Alonso. / I. V.

Isaac Vaquer

Isaac Vaquer

El uso de plásticos de un solo uso ya no es una opción en Baleares a raíz de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados y a muchas empresas les ha pillado el toro. Una pajita por aquí, unas cucharitas de plástico por allá, los ejemplos de incumplimientos no son muy difíciles de ver.

Una acción de limpieza de playas de Plastic Free Ibiza. | JUAN A. RIERA

Una acción de limpieza de playas de Plastic Free Ibiza. | JUAN A. RIERA / Isaac vaquer. eivissadasdasdasd

«Aunque la ley de residuos nace en 2019 y se va avisando de los cambios, cuando los establecimientos abren cada temporada se encuentran de golpe con nuevas restricciones y, como no lo han previsto, de golpe tienen que cambiarlo todo», explica la coordinadora de Plastic Free Ibiza y Formentera (PFIF), Ayelén Alonso.

El problema es que antes era un proceso, ahora hay multas «y son muy elevadas». La distribución, venta y uso de artículos de un solo uso está recogida como infracción grave, con penas de 9.001 a 300.000 euros.

Desde PFIF informan a las empresas, pero algunas hacen oídos sordos o no le dan importancia al tema. Es por eso que Alonso teme que esas multas lleguen y entonces se genere un rechazo mayor entre los negocios hacia la retirada de residuos de un solo uso. Un rechazo que ya existe, porque hay empresas que perciben el cambio como una complicación y no como una mejora.

Con el objetivo de lograr que las empresas se impliquen en este cambio, IbizaPreservation se ha integrado en la Iniciativa Mundial de Turismo y Plásticos lanzada por la ONU a través de la Organización Mundial de Turismo. A raíz de este paso, la fundación prepara una serie de acciones formativas para facilitar el cambio a las empresas y, sobre todo, que la reducción de residuos se haga por convicción, no por obligación.

La Iniciativa Mundial de Turismo y Plástico está abierta a cualquier empresa y ofrece un enorme abanico de recursos, además de visibilidad a nivel internacional.

Escaparate y circularidad

De la Iniciativa Global Turismo y Plástico forman parte grandes empresas como TUI, Booking, Iberostar o Palladium. Pero también puede integrarse un hostal Pepe cualquiera y codearse con estos gigantes. Ayelén Alonso invita a todas las empresas del sector a formar parte de esta iniciativa.

Hacerlo es gratuito y pone a disposición de sus integrantes toda una serie de recursos para guiar en el proceso de eliminación del plástico. Hay que rellenar un formulario y cumplir una serie de compromisos «que no distan mucho de lo que ya hacen muchas empresas: trabajar por reducir el plástico, favorecer en la cadena de suministro opciones alternativas, reducir la producción de residuos y fomentar la educación del empleado, que al final es el mejor embajador de estas buenas prácticas».

Para que todo esto no quede en agua de borrajas, a final de año las empresas deben hacer un informe de resultados de las acciones que han llevado a cabo y de sus resultados. «Habrá empresas que piensen en lo engorroso de este trabajo, pero no se trata de nada que no tengan que hacer ya. Es su plan de circularidad».

Este documento ya es obligatorio este año para los hoteles de cuatro y cinco estrellas y lo será para el resto el año que viene, según la ley de medidas urgentes para la sostenibilidad y la circularidad del turismo. «Así que el informe no es un sobreesfuerzo», subraya Alonso, «es un modo de aprovechar algo que ya tienes que hacer situando a tu empresa en un escaparate con mucha visibilidad».

Por otra parte, recuerda que el hecho de formar parte de este colectivo puede integrarse como una acción más dentro del plan de circularidad.

Dar respuestas

La participación de IPF en la iniciativa de turismo y plástico surge de una reflexión interna: ¿qué hacer para de verdad mejorar esta situación? «Hablamos de un problema global. Entonces, si hay gente trabajando por cambiarlo, ¿por qué quedarse sólo con lo que uno conoce?». Explica que existen islas, como Tilos (Grecia) o Zlarin (Croacia), que ya se acercan al residuo cero y basan su turismo en la promoción de este modelo. «Como ya tenemos ejemplos y eso es precisamente lo que necesitan nuestras empresas, ver cómo se hace, queremos acercar estas buenas prácticas para formar una comunidad».

Es por ello que PFIF desarrollará tras la temporada una serie de acciones formativas para fomentar la economía circular y ofrecer herramientas que lo faciliten, enseñando cuáles son los mejores proveedores, cuáles son las mejores alternativas al plástico o cómo formar adecuadamente a los empleados. «La idea es ponerlo fácil, sentar unas bases con las que poder decirle a la empresa: esto es lo que hay que hacer para avanzar en este tema».

También se quiere dar una visión realista. No es cuestión de demonizar el plástico, «es un material maravilloso, pero como todos los materiales el problema es el uso que se le dé. Hemos abusado de este material y ahora lo tenemos por todas partes», señala. Es por ello que considera necesario concienciar de esta realidad, para que sean las empresas las que tomen la iniciativa.

«Llegar al cero residuo es complejo, por el hecho de vivir ya generamos un residuo, pero es importante ser consciente de que cada cosita que hacemos tiene un impacto».

Con estas acciones esperan que también se llegue a concienciar al turista e incluso atraer turismo. «Ya se está hablando de turismo regenerativo, aquel que ya no es que no contamine, sino que trabaja para mejorar el medio ambiente», ejemplifica, algo que todavía queda lejos pero a lo que asegura que se encamina Europa.

Recuerda que la Unión Europea orienta sus políticas en esta dirección, por lo que «llegará un momento en el que esa normativa vendrá de arriba. Ahora es una opción, pero en algunos años será obligatorio».

Estos talleres, que están en proceso de elaboración, también incluirán acciones para generar comunidad y conciencia entre las empresas.

Responsabilidad de todos

La ley de residuos pone el foco en las empresas como grandes productores, pero la coordinadora de PFIF recuerda que tanto los ciudadanos como las instituciones tienen una responsabilidad en el camino hacia la circularidad. «Si el ciudadano ve que la institución lo hace, acabará entrando en esta dinámica, y las instituciones deben motivar a los ciudadanos, porque ya se han puesto en marcha tasas que penalizan a los municipios que no reciclan bien».

Ayelén Alonso pone de relieve que este cambio es una necesidad imperiosa, dado que al vertedero de Ca na Putxa le quedan pocos años de vida útil (apenas un lustro, según los datos del Consell insular) y será necesario poner en marcha una alternativa que no pasa por un nuevo vertedero.

«Sea cual sea la alternativa que se impulse, será imprescindible que reduzcamos la generación de residuos, porque no podemos llenar de basura la isla», alerta Alonso, que recuerda que Balears es la comunidad autónoma que más residuos genera y Ibiza la isla líder en este ranking, con dos kilos de basura al día por habitante.

De hecho, Ayelén lanza al aire la propuesta de que las visitas a Ca na Putxa sean obligatorias para que la gente y las empresas sean conscientes del impacto que generan los residuos de toda la población en el entorno.

Advierte la responsable de Plastic Free de que este cambio de actitud es necesario para que Ibiza siga viviendo del turismo, puesto que la generación de residuos es un gota a gota que acaba colmando el vaso. «El turista no va a querer venir a una isla que ha arruinado su medio ambiente, porque el paraíso en el que vivimos es el atractivo que tenemos», sentencia.

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