Los coordinadores de los centros de salud de salud Balears registraron ayer en la conselleria de Salud y Consumo una carta firmada por 423 médicos de 44 centros de salud de las islas reclamando que el departamento que dirige Patricia Gómez atienda las reclamaciones que la gerencia ha sido «incapaz» de abordar ante la «alarmante situación» de la Atención Primaria.

En nombre de los facultativos firmantes, Gorka Iriarte y Alfonso Ramón, presentaron en la sede del Sindicato Médico de Balears (Simebal) en Palma la carta en la que proponen hasta una docena de medidas para paliar la situación y mejorar la calidad asistencial.

De la docena de medidas, los facultativos destacaron un plan de choque para impulsar una reactivación horaria de consultas ante la falta de personal sustituto, fijar un límite de 25 consultas al día y una redistribución de tareas entre los distintos estamentos de la Atención Primaria.

Más en detalle, los médicos propusieron, ante la saturación de las consultas por las bajas o las vacaciones, concentrar el trabajo en una jornada más reducida, hasta las 15 horas o hasta las 17 horas para completar las jornadas laborales.

Los representantes subrayaron el consenso «nunca visto» que se ha alcanzado entre los médicos de Atención Primaria en un escenario de «hartazgo». Los médicos, explicaron, reclaman principalmente más tiempo para poder ver a los pacientes.

60 pacientes en un día

Según argumentaron, la situación ideal es poder dedicar unos diez minutos a cada paciente y hasta un máximo de 25 pacientes al día. Sin embargo, lamentaron, las agendas «se estiran como un chicle» y se dan casos de facultativos que han llegado a atender a 60 personas en una jornada.

Atención Primaria, hicieron hincapié, arrastra un problema de falta de profesionales al que ahora se suman las bajas, las vacaciones y las jubilaciones sin relevo.

Así, explicaron, cada año se jubilan unas 20 personas y en 2024 está previsto que se jubilen unos 40 profesionales. «Si en el corto plazo no se revierte la actual situación, habrá un problema serio», advirtieron.