-Hace un mes usted no tenía intención de presentarse como número uno de su partido, ¿qué ha pasado en las últimas semanas?

-Es cierto, y la verdad es que ha sido un poco de sorpresa. Mi intención nunca ha sido la de ser candidato, por lo que me coge desprevenido en esta ocasión, sobre todo por lo que nos ha pasado. En 1995 sucedió lo mismo,cuando el entonces secretario general, Bartomeu Ferrer Marí, dimitió. Soy el secretario general del partido y si pasa lo que nos ha pasado, no quedando mucho tiempo para alternativas, la responsabilidad me dice que hay que aceptar, y lo hago con toda la ilusión.

-Hay muchas personas que no acaban de entender lo que le ha ocurrido a su partido a dos semanas de cerrar el plazo para las candidaturas. ¿Cómo se lo explica?

-Intentaré ser claro y concreto. Tuvimos un candidato [Joan Serra Mayans] que se presentó a la ejecutiva, que lo aceptó, y a la asamblea, que también lo aceptó. A partir de entonces este señor tiene las manos libres para trabajar, pero esto no quiere decir que no cuente con la ejecutiva del partido. No contó con ella y la ejecutiva le pidió participación apuntando cambios en esa lista. Este señor se negó y dijo que no se movía, y que si lo tenía que hacer se iba a su casa. De esto ha salido esta crisis, que está solucionada y ojalá no se hubiera producido.

-¿Uno de los motivos es que usted no aparecía en la lista de Serra Mayans?

-En absoluto, esto no es motivo porque yo sabía que no entraba en su lista a los pocos días de salir candidato. Mi postura fue entonces la de callarme y seguir trabajando en el partido.

-Da la sensación de que tras esta crisis su figura ha salido reforzada dentro del PSOE de Formentera.

- Si he salido reforzado o no, no lo sé, veremos después en función del trabajo y de los resultados. Ahora, en caso de que hubiera salido reforzado, hubiera preferido que no fuera así y que no hubiéramos vivido esta crisis. Como he dicho antes mis aspiraciones no eran las de presentarme como candidato, pero es cierto que no he tenido inconveniente cuando el partido me lo ha pedido. Insisto ojalá que esto no hubiera pasado.

-Cuando vino el secretario general del PSIB-PSOE, Francesc Antich, mantuvo una reunión con usted y otra con GxF ¿Qué puede contar de esos encuentros?

-Antich vino a hablar de secretario genera a secretario general y también mantuvimos una reunión con GxF. Él quería, con su presencia en Formentera, conocer sobre el terreno lo que estaba pasando. Creo que en 48 horas cerrar esta crisis y conseguir llegar a un acuerdo con GxF para consensuar el candidato al Parlament, ha valido la pena.

-El PSOE y GxF empezó a negociar en febrero. ¿Por qué se ha tardado tanto en llegar a un pacto?

- Sí, hemos tardado mucho por diferentes motivos. Al final lo importante es que se haya conseguido. Pero hubo momentos en los que estaba realmente preocupado porque pensaba que no íbamos a llegar a este acuerdo y no me podía hacer a la idea. Con un candidato en la derecha conocido y que la izquierda no fuera capaz de plantearle cara de forma unida me parecía increíble. Ahora estoy convencido de que el diputado de Formentera será progresista.

-¿Quién ocupará el segundo puesto de su lista?

-Estamos trabajando. Llevo cinco días con esto y me queda una semana, voy a agotar los plazos para incorporar a independientes que no sean del partido. Sé que es difícil porque a última hora y corriendo no es fácil, pero por lo menos lo voy a intentar.

-¿Y el secretario de organización, José Ramón Mateos, estará en su lista?

-José Ramón Mateos estará en lista pero no en puestos de salida. Eso es sencillamente porque él ha manifestado su deseo de no ocupar ninguno de los primeros puestos. Mateos es importante para el PSOE.

-¿Este reto supondrá un cambio de vida para usted?

-Es un objetivo que no tenía marcado en la agenda y supondrá un cambio seguramente mayor del que yo pienso, y que tendré que afrontar lo mejor que pueda. Además, nosotros no creemos que vayamos a ganar por mayoría absoluta, hasta allí no llego, pero sí que vamos a sacar un buen resultado y que se dará el escenario como para formar gobierno en el Consell-Ayuntamiento. Es un reto muy importante para cualquier partido político.

-¿Con qué partidos se plantea pactar el PSOE después de las elecciones?

-Normalmente siempre se llegan a acuerdos con los más cercanos ideológicamente y espero que eso sea suficiente. De todas formas, no hay que descartar pactos con otros partidos para garantizar la gobernabilidad del Consell. Esto, desde luego, no será fácil, y el que piense lo contrario es que no conoce muy bien lo que va a ser este nuevo Consell. Pienso que aun cuando aunemos esfuerzos, será una labor con muchas dificultades.

-¿Qué va a representar este Consell para la isla?

-Lo hemos dicho muchas veces: es un logro importantísimo. Calificaría estas elecciones de históricas, exceptuando las primeras elecciones democráticas. Una vez consolidada esta realidad que todos anhelábamos hay que poner los pies en el suelo y ser conscientes de que esto no será fácil. Personalmente pondré todo mi empeño para que esto salga adelante.

-¿En qué se basará su campaña electoral?

-El PSOE se diferencia claramente de la derecha en sus propuestas sociales. Uno de los puntos estrella será una residencia para nuestros mayores. También es importante tener en cuenta la inmigración. Es un tema social muy importante en la isla y hay que afrontarlo ahora, no más tarde. Tampoco hay que olvidar el decidido impulso a la participación ciudadana para poder empezar a hablar de democracia participativa, es decir, abrir vías para que los ciudadanos se sientan protagonistas de las decisiones.

-¿Y en urbanismo?

-Esta es una materia que me preocupa. En estos momentos estamos haciendo una modificación de las Normas Subsidiarias y difícilmente podremos aprobarlas inicialmente antes de las elecciones, porque falta un informe de la conselleria balear de Medio Ambiente. Cuando lleguemos al Consell habrá que darle trámite lo más rápido posible, no podemos estar sin ordenación.

-¿Le parece adecuado el crecimiento que plantea las NNSS l?

-El límite lo marca el Plan Territorial Insular a diez años y en nuestro caso el crecimiento afecta a los núcleos urbanos con la creación de vías perimetrales en Sant Francesc, Sant Ferran, es Pujols y también el Pilar de la Mola. Esto evitará la concentración de vehículos en el centro de los pueblos y la creación de aparcamientos, que no tenemos. Entiendo que estas cosas hay que hacerlas porque también evitarán que tengamos más territorio urbanizable. No hay que olvidar que no se crece en rústico, que se mantienen las protecciones y que hemos desistido de crear núcleos rurales.