El colectivo de sanitarios de Ibiza salió ayer de nuevo la calle para exigir que se compense el coste de la insularidad con un plus equivalente al de Canarias o Formentera. La lucha para estas reclamaciones se ha encauzado con la creación de la plataforma Unión de Sanitarios por la Equiparación de la Indemnización por la Residencia (Useiri) que, en la segunda caravana de protesta movilizada en dos semanas, contó con la adhesión del Sindicato Médico de Balears (Simebal).
«Vamos a seguir con las concentraciones y con parones laborales hasta conseguir nuestras reivindicaciones», subrayaba la portavoz de Useiri, Sandra Cuadrado, antes de que 110 coches iniciaran la marcha desde la avenida 8 d’Agost, junto al Centro de Salud de Vila. «Un médico aquí cobra 100 euros de plus, mientras que en Canarias es de 600 nada más llegar», añadió.
Desde esta plataforma inciden en que Ibiza sufre un déficit de 60 médicos y 400 enfermeras a causa de la escasa cuantía de este complemento, insuficiente para compensar la carestía de la vivienda en la isla. «Con nuestro sueldo, es imposible pagar 1.200 euros de alquiler, así que acabas compartiendo piso», lamentó Cuadrado, enfermera de profesión.
Cuadrado valoró la respuesta que, menos de tres meses después de su creación, ha obtenido Useiri, con más 500 adhesiones. También destacó que todos los partidos políticos se han reunido con la plataforma para escuchar sus reivindicaciones, salvo el PSOE, así como tampoco el Govern balear.
También abundó en estas críticas el portavoz de Simebal en las Pitiusas, David Fernández. «El único avance que hemos logrado es que las reivindicaciones hayan pasado de ser propias de sindicatos a que nazca una plataforma como Useiri. Se ha debido a la falta de reconocimiento por parte del Govern balear, ni ahora con el PSOE ni antes con el PP», sentenció.
Tanto Fernández como Cuadrado quisieron desmarcarse de cualquier intento de los partidos políticos «de apoderarse de estas reivindicaciones». De hecho, antes de partir la caravana, ambos portavoces se dirigieron de nuevo a la prensa para expresar su desacuerdo con la presencia de una furgoneta con pancartas de Vox que, según indicaron, pretendía sumarse a la movilización. «Les hemos pedido que se vayan, porque no vamos a permitir que se apoderen de nuestras reclamaciones para conseguir votos, gracias a una movilización que no tiene nada que ver con la política», apuntó Fernández.
Por su parte, Cuadrado añadió que «Vox ya lo hizo en la primera manifestación». «Hay gente que ha pensado que somos afines, pero esta movilización es apolítica y no permitiremos que se apoderen de ella», incidió. Junto al Centro de Salud, también acudieron algunos cargos públicos de PP y de Ciudadanos, «pero no se están intentando apropiar de la manifestación», adujo Cuadrado.
Finalmente, poco después de las doce del mediodía partía la caravana desde la avenida 8 d’Agost para recorrer las principales vías de Vila por un solo carril, sin causar ningún incidente. Una hora después, concluía a su paso por el hospital Can Misses, donde un grupo de sanitarios se concentró a las puertas al paso del convoy.
segunda caravana de protesta de la unión de sanitarios por la equiparación de la indemnización por la residencia. 1 Un total de 110 coches partieron de la avinguda 8 d’Agost para recurrer las principales vías de Vila.
