Agentes de la Policía Local de Santa Eulària paralizó una fiesta ilegal de la que habían sido alertados por un aviso la madrugada del domingo, en una casa en la zona de Can Mosson, en Santa Eulària. Los policías, alertados de la celebración de esta fiesta con una decena de asistentes, acudieron a la zona, donde pudieron comprobar la presencia en el exterior de la vivienda de numerosos vehículos estacionados, así como que en el interior había más de diez personas.

Pese a los requerimientos de la Policía, las personas que se encontraban en el interior de la vivienda no abrieron las puertas a los agentes para no poder ser identificados. Tras varias gestiones con los propietarios de la casa, las personas que se encontraban en la vivienda accedieron a salir y por fin la Policía pudo identificarles a todos. Los policías pararon la fiesta y todos los asistentes abandonaron el lugar.

No ha sido la única actuación de los agentes de Santa Eulària este fin de semana, ya que también levantaron acta por ruidos en otro punto de la localidad, el pasaje d’en Ros, el domingo por la noche. Al parecer, en un piso se celebraba una reunión con música a todo volumen que originaba molestias a los vecinos, pasado el toque de queda, sobre las diez y cuarto de la noche. Los agentes les obligaron a parar la música e identificaron a las seis personas allí reunidas, que no eran convivientes.

Por último, los agentes de Santa Eulària recibieron una hora después, cerca ya de la medianoche, otro aviso de vecinos quejándose por el ruido que procedía de un piso de la calle del Mar, también en el centro de la localidad. Los policías no pudieron constatar a su llegada que el ruido fuera excesivo, pero sí que, de las cuatro personas reunidas en la casa, solo dos eran convivientes, por lo que se levantó acta contra todos los presentes.

Denuncias por reuniones de no convivientes en Vila

La Policía Local y y la Policía Nacional han levantado este fin de semana un total de 90 denuncias relacionadas con el incumplimiento de las restricciones sanitarias en Vila. La mayoría fueron por no hacer el uso correcto de la mascarilla, informaron desde el Ayuntamiento. Los agentes también formularon 24 denuncias por saltarse el toque de queda, 14 por no respetar la prohibición de no reunirse con no convivientes y dos denuncias a locales por permitir consumir en la puerta o no llevar la mascarilla.