El Ayuntamiento de Sant Antoni ha aprobado la adjudicación del contrato de concesión de las instalaciones temporales en el litoral dentro de su término municipal, que estarán operativas a partir de este fin de semana. En general se registra una reducción media del 20% de las ocupaciones permitidas para garantizar la distancia y respetar la normativa sobre prevención y seguridad sanitaria establecida para reducir el riesgo de contagio por Covid-19.

La reducción de elementos temporales viene motivada, además de por la bajada de las instalaciones adjudicadas, porque ha habido siete lotes que no se han licitado o adjudicado, lo que supone más espacio libre en las playas del municipio, según apunta el Consistorio en un comunicado.

La disminución de elementos se plasma especialmente en la playa de s'Arenal, donde más de un 50% de la superficie que estaba ocupada por instalaciones temporales quedarán libres, tras adjudicarse cuatro lotes de los once disponibles en años anteriores.

Un total de seis empresas se han presentado al proceso de licitación, de las cuales cinco han sido adjudicatarias de los nueve lotes que estarán operativos en las playas de es Pouet, s'Arenal (4), Caló des Moro, Cala Gració, Cala Gracioneta y Cala Salada. De esta forma, de los 16 lotes licitados con 698 hamacas, se han adjudicado nueve lotes que suponen 442 hamacas. No obstante, tras aplicar la reducción media del 20% para garantizar la distancia de seguridad, finalmente se instalarán 335 tumbonas.Rebaja del precio

El Ayuntamiento ha rebajado el precio de licitación de las concesiones en un 60% respecto a años anteriores con el objetivo de intentar paliar los efectos negativos de la crisis económica ocasionada por la pandemia del coronavirus y para garantizar la puesta en marcha del servicio en todas las playas del municipio como reclamo del sector turístico y como una actividad más para la reactivación económica del municipio.

En cuanto a la normativa, se aplicará el Plan de medidas excepcionales de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la Crisis Sanitaria Ocasionada por la Covid-19, aprobadas por el Consell de Govern el 19 de junio, sobre las medidas obligatorias que deberán cumplir las empresas concesionarias. En relación a la distancia de seguridad, se ha realizado un cálculo de los elementos que se pueden instalar en cada lote y se ha establecido una superficie de cuatro metros cuadrados de superficie por cada unidad de instalación (dos hamacas y una sombrilla), que estarán separadas por dos metros de seguridad, y a la que se sumará la distancia interpersonal o entre grupos de personas de como mínimo un metro y medio.

En cuanto a la normativa de limpieza, las concesionarias deberán llevar a cabo la limpieza y desinfección de las instalaciones y los elementos de las playas utilizando sustancias que no resulten perjudiciales para el medio ambiente y mantener todos los vehículos higienizados y desinfectados antes de cada uso, así como las hamacas, duchas o cualquier otro objeto de uso rotatorio cada vez que se cambie de usuario. Igualmente, el Ayuntamiento se adaptará a las posibles actualizaciones que realicen las autoridades sanitarias realizando las modificaciones necesarias en los protocolos y medidas de seguridad para aplicarlas en las instalaciones temporales.