La concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Ibiza pidió ayer a las dos operadoras del servicio de GPS del municipio, la Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza y Nitax SA, los informes sobre la prestación del servicio, así como toda la documentación que se establece en el convenio que regula el uso de esta herramienta, y que firmaron tanto el Ayuntamiento como las dos operadoras. Todos los datos que se reclaman abarcan el período del 25 de mayo de 2019, fecha en la que se firmó el convenio, hasta enero de 2020.

Desde el Ayuntamiento solicitan a las dos operadoras del servicio de GPS el listado de taxistas inscritos en el sistema, las cuotas emitidas -cobradas y pendientes- y el informe de las incidencias en la prestación del servicio, además de la documentación tributaria y de la seguridad social.

«Entendemos que la transparencia debe darse en cualquier servicio público y es importante que tanto la Administración como los mismos taxistas conectados a los GPS conozcan de primera mano el funcionamiento para poder aplicar, si es necesario, medidas necesarias para mejorar», explicó el teniente de alcalde y concejal de Movilidad, Aitor Morrás, que reiteró que el objetivo no es otro que el de «ofrecer un servicio público de taxi de calidad, donde salgan ganando tanto usuarios como taxistas».

Numerosas quejas

La medida llega después de que la Asociación de Taxistas Profesionales de Vila se dirigiera al Ayuntamiento de Ibiza a principios de enero para que aclarase si los operadores de GPS que distribuyen la flota podían adjudicar servicios ajenos al municipio, tal y como «estaba realizando el que gestiona la Asociación de Taxistas Autónomos de la ciudad» y ellos «no», informaron a Diario de Ibiza.

La respuesta de Vila llegó hace apenas unos días, el pasado martes 21 de enero, cuando a través de un comunicado se informó a los representantes de todas las asociaciones de taxistas que los vehículos de fuera del municipio no podrían prestar servicios de GPS.

Con esta medida, con la que no quedó conforme el presidente de la Federación Insular del Taxi y de la asociación mayoritaria de Vila, Alejandro Cardell, el Ayuntamiento pretende forzar que el Consell se encargue de la regularización de funcionamiento del GPS en toda la isla, ante la falta de «regulación» y las «constantes quejas» de algunos taxistas, fundamentalmente «los que operan con el segundo GPS» del municipio, explicó a este diario el concejal de Movilidad, Aitor Morrás.