La consellera de Salud del Govern, Patricia Gómez, anunció ayer en Ibiza que Can Misses abrirá en abril un hospital de día de patología dual para tratar a pacientes con problemas de adicciones y que, a su vez, sufren enfermedades mentales. Este servicio contará con ocho plazas y prestará atención, «mayoritariamente», a pacientes con trastornos por consumo de drogas y se dotará con, al menos, tres profesionales: un psiquiatra, una enfermera y un terapeuta ocupacional. También se estudia la posibilidad de incorporar a una psicóloga.
Tras la presentación en Can Misses del Plan Estratégico de Salud Mental 2016-2022, la consellera balear de Salud remarcó que Balears es una comunidad «atractiva» para trabajar y que Can Misses cuenta con servicios que otros hospitales no tienen, tras ser preguntada por si temía que la falta de psiquiatras y la dificultad para contratar médicos provoque que no se pueda poner en marcha este hospital de día, del que destacó que se trataba de una iniciativa «pionera» en Balears. «Faltan médicos en determinadas especialidades, pero la de Anestesia, por ejemplo, que era deficitaria, ya está completa», señaló Gómez.
En el mismo acto, la jefa de Psiquiatría del Área de Salud pitiusa, Cristina Merino, reconoció que en estos dos últimos meses han atravesado «dificultades» e hizo referencia a la unidad de Salud Mental de es Viver, donde explicó que hay una excedencia de un psiquiatra que no se ha cubierto, pero no explicó si se reforzará la plantilla para compensar las reducciones de jornada de los psiquiatras de este servicio. «Hemos tenido dificultades para suplir jubilaciones, excedencias y bajas y ha habido un malestar comprensible por la situación y por la sobrecarga de trabajo, por lo que agradezco la paciencia de los profesionales», señaló Merino.
En cuanto al Plan Estratégico de Salud Mental, Gómez subrayó que a casi 20.000 personas de las Pitiusas se les ha diagnosticado un trastorno de salud mental y que esta iniciativa pretende dar respuesta a las «necesidades reales» de los pacientes y de sus familiares. Asimismo, hizo hincapié en la importancia de luchar contra el «estigma» de los que sufren estas patologías.
Aparte de la puesta en marcha en Can Misses del hospital de día de patología dual, la consellera balear de Salud informó de la creación de una consulta de atención a las personas con conductas adictivas en Formentera. Un profesional se desplazará a la pitiusa menor una vez por semana para dar «una respuesta eficaz» a los problemas de las adicciones en esta isla.
La consellera balear de Salud insistió en que esta iniciativa no es de un gobierno, sino que se trata de «una hoja de ruta» en la que han participado 160 personas de todos los ámbitos. En concreto, el documento ofrece medidas de prevención, asistencia y rehabilitación. En el área preventiva destaca el programa de autocuidado para evitar el síndrome de agotamiento profesional en salud mental y el programa 'Temps de nins', dirigido a menores cuyos progenitores sufren algún trastorno mental, y el Observatorio del Suicidio. Su responsable, Nicole Haber, advirtió de que el suicidio es un «grave problema de salud pública» que también afecta a los familiares, por lo que considera esencial que desde este plan estratégico se lleven a cabo acciones preventivas
En la presentación del Plan Estratégico de Salud Mental 2016-2022 también intervinieron el coordinador autonómico de Salud Mental, Oriol Lafau; Antonella Greco, de la Asociación Pitiusa de Familiares de personas con Enfermedad Mental y niños con autismo y otros trastornos del desarrollo (Apfem), y Quim García, miembro de la Oficina de Salud Mental de Balears.
Lafau describió este plan estratégico como «el documento más importante de salud mental», que ha supuesto un trabajo «titánico» y en el que se han implicado profesionales, afectados y familiares y asociaciones. García, por su parte, subrayó que el objetivo es desarrollar el plan «del mejor modo posible», es decir, «que lo que está escrito no se quede en papel».
Greco, por su parte, destacó que los servicios de Apfem forman parte de la red pública de servicios sociales y que su objetivo es incrementar el bienestar de afectados y familiares.Ascensor
Por otra parte, los pacientes con dificultades de movilidad que utilicen el aparcamiento del Can Misses disponen desde ayer de un ascensor que comunica la planta sótano del 'parking' con la entrada principal del hospital después de tres meses de obras. Se trata de un ascensor montacargas eléctrico para camillas, hecho a medida, con capacidad para 13 personas o 1.000 kilos. El presupuesto ha sido de 99.250 euros, según informó ayer el Área de Salud de Ibiza y Formentera.
