Esta semana se han presentado al Comité Ejecutivo de Fomento del Turismo las principales conclusiones de la reciente encuesta enviada a los socios, para conocer sus valoraciones sobre la temporada 2018 y los aspectos en los que se debería trabajar el próximo año.

En cuanto a las valoraciones de rentabilidad de la temporada, la mayoría afirma que la buena climatología del verano europeo y el mundial de futbol han podido afectar de forma negativa a las ventas, por lo que la temporada alta se ha vendido más tarde, teniendo que ajustarse los precios a la baja a última hora.

Por otra parte, los meses del inicio y final de temporada han sido similares al año anterior; con los datos aportados, se confirma una tendencia de bajada de precios y de ocupación en los meses principales de la temporada. En cambio, para las empresas de restauración y comercio, la temporada ha sido muy irregular con un resultado ligeramente menor que la temporada anterior.La principal queja de los turistas

La principal queja de los turistas

La principal queja que se recoge por parte de los visitantes es que los precios de temporada alta no se ajustan a la calidad esperada, en especial en lo relativo al servicio. Esto se debe a la falta de cualificación de personal, especialmente motivado por el problema de vivienda para trabajadores.

De acuerdo con esto, los empresarios solicitan oferta formativa especializada para mejorar la calidad del servicio y, en este sentido, se espera la pronta creación de la Escuela de Hostelería. Otro de los problemas detectados ha sido que las playas no han estado listas para la temporada, con concesiones de hamacas que se han entregado muy tarde o falta de socorristas desde abril a final de octubre.

Una gran reivindicación es que se ha de fomentar el turismo de familias, que es muy sensible a variaciones de precio, por lo que la ecotasa para este segmento de mercado es un gran problema, en especial por la falta de mejoras visibles para aquellas familias que son habituales al destino. Sería muy recomendable que las instituciones trabajaran en esa línea.

También preocupan en el sector los cambios de normativas turísticas y en especial si se hacen a nivel balear, sin tener en cuenta las singularidades de Ibiza. Concretamente, la polémica regulación del alcohol en la oferta de "todo incluido" que en Ibiza, está en su práctica totalidad dedicada a turismo familiar y que no ha generado nunca conflictos fuera de los hoteles.

En este aspecto, los socios de Fomento del Turismo que se tomen medidas normativas que restan competitividad frente a otros destinos turísticos del mediterráneo. Se hace necesario que las administraciones locales se muestren firmes en la defensa de los intereses de Ibiza, por encima de otros intereses que se alejan del hecho incontestable de que el turismo es la principal fuente de empleo y riqueza local.

Como resumen, los empresarios miran con cautela al 2019, en el que habrá que trabajar para dar más calidad en los servicios, para compensar las ofertas a precios más bajos de destinos competidores. Ibiza tiene muchos valores positivos para seguir diferenciándonos y mantener una posición de cabeza entre los destinos de sol y playa europeos, pero en lo que hay total unanimidad, es en suspender con muy baja nota, los servicios que las diferentes administraciones deben prestar a los usuarios y en especial en los meses turísticos.

Las expectativas para 2019

Las expectativas para 2019

Para la temporada 2019 las expectativas varían por sectores productivos, las empresas de alojamiento esperan poder mantener las cifras de 2018, sin grandes bajadas, pero restauración y comercio, esperan peores cifras que este verano.

Fomento de Turismo cuenta con el dato positivo de que la Semana Santa ayudará a empezar un poco antes la temporada, aunque los términos en los que finalmente se materialice el Brexit pueden tener especial incidencia en Ibiza, donde este mercado es mayoritario.

Pese a que los datos facilitados por los touroperadores británicos sobre la venta a día de hoy sobre la próxima temporada, sí reflejan una ligera bajada de ventas para Ibiza, ésta es mucho menor que la que se observa para el conjunto nacional o destinos como Canarias o Mallorca, lo que nos dice que nuestro destino sigue teniendo una buena demanda siempre que el precio este ajustado a la calidad de los servicios ofertados.