El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, abogó ayer por estar «vigilantes» con el aumento del 50 al 75% de la bonificación estatal de los pasajes aéreos para residentes, al objeto de que las compañías «no lo diluyan», aprovechando la ocasión para subir precios.

Marín Quemada reconoció que ese puede ser «un problema serio» y que ya «está sobre la mesa», cuando el objetivo consiste en «mantener unos billetes baratos que faciliten desplazamientos».

A su juicio, existe la posibilidad de que las compañías aéreas «se aprovechen para aumentar precios y se diluya la subvención», por lo que hay que permanecer «en actitud vigilante» y hacer partícipe a la sociedad «para que denuncie si se detecta un comportamiento irregular en cualquier sector de actividad».

Beneficios generales

El presidente de la CNMC defendió que esa subvención para residentes no sólo beneficia a los ciudadanos de Canarias, Balears, Ceuta y Melilla, sino a la actividad en esos territorios, porque detrás de cada billete hay «una operación económica, una visita, unas vacaciones o un viaje de negocios».

«Las áreas que se encuentran alejadas deben tener algún tipo de ayuda o subvención», consideró Marín Quemada, lo que es diferente a «construir sociedades subvencionadas, y no se debe confundir».