El desalojo de las familias que okupaban las viviendas de la Unidad de Actuación 27 de sa Penya el año pasado servirá de ejemplo para el que el Ayuntamiento de Palma quiere llevar a cabo en el barrio marginal de Son Banya, azotado como el de Ibiza por la venta y el consumo de estupefacientes. Así lo hizo saber ayer el Ayuntamiento de Vila tras la reunión que mantuvieron el teniente de alcalde, Joan Ribas, y el director del servicio de Bienestar Social, Xavier Vilamanyà, con la concejala de Bienestar Social del Consistorio palmesano, Mercè Borràs, y su director general de Bienestar Social, Joan Antoni Salas.
El objeto de la visita fue dar a conocer el operativo, los protocolos de actuación y la coordinación entre las diferentes instituciones que aplicó el Ayuntamiento de Vila en el desalojo de esa manzana del barrio de sa Penya, que comenzó a finales de abril de 2016 y se prolongó durante varios días.
El Ayuntamiento de Palma ha planteado como modelo operativo la intervención llevada a cabo en Vila debido a que próximamente tendrá lugar una intervención de características similares en el barrio palmesano de Son Banya. Las situaciones socioeconómicas de estas dos barriadas de Palma y Ibiza son similares y es por eso que se ha creído conveniente dar a conocer la experiencia de la intervención en sa Penya.
La concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Ibiza adquirió el compromiso de facilitar la documentación y el protocolo de actuación y coordinación, el modelo de contrato y posibilidades de realojo utilizado con las familias así como la creación de un equipo de trabajo con todas las concejalías y empresas suministradoras de servicios implicadas.
Los representantes del Ayuntamiento de Palma visitaron conjuntamente con el concejal Joan Ribas la Unidad de Trabajo Social de sa Riba para conocer la experiencia del personal más implicado en el barrio, señalaron desde el Ayuntamiento a través de una nota.
