Un grupo de científicos especializados en micología se encuentran estos días en las Pitiusas para profundizar en el conocimiento de los hongos de Ibiza y Formentera. Ayer realizaron una sesión de trabajo en un bosque de Santa Gertrudis y entre hoy y mañana realizarán otras incursiones en montes de las dos islas. El martes por la noche, dentro del programa de fiestas de Forada, se expondrán diferentes especies de setas y hongos que habrán recolectado en ese trabajo de campo.

El experto micólogo mallorquín Josep Lluís Siquier, autor junto con Carlos Constantino de la guía ´Els bolets de les illes Balears´, encabeza la expedición. Sus investigaciones sobre las distintas especies de hongos que se pueden localizar en los bosques y montes de las Pitiusas le ocupan desde hace doce años. Le acompaña, como en otras ocasiones, el también especialista en la materia Joan Carles Salom, que ha publicado con él numerosos trabajos en revistas especializadas.

Pero en esta ocasión, la expedición científica es más numerosa, ya que les acompañan otros dos micólogos de reconocido prestigio: Jaume Llistosella, del departamento de Biología Vegetal de la Universidad de Barcelona y Fernando Esteve-Raventós, profesor de Botánica de la Universidad de Alcalá de Henares. Completa el grupo científico la doctora Laura Llorens, también de la Universidad de Barcelona.

Josep Lluís Siquier asegura que tiene material acumulado para editar una completa guía de los hongos de Ibiza y Formentera, con abundantes fotografías. Pero esto supone una inversión económica importante y es preciso contar con algún apoyo financiero. Señala que está en conversaciones con una entidad de ahorro que está dispuesta a emprender esta aventura, pero todavía no existe fecha para que este libro vea la luz.

Siquier y sus colaboradores tienen catalogadas 350 especies distintas de hongos y setas de todos los tamaños en la isla de Ibiza, y unas 112 en Formentera (que en su gran mayoría son las mismas que las de Ibiza). No obstante, en cada viaje que realizan a las islas se datan nuevas especies que antes no aparecían documentadas. «En Formentera tenemos 112, pero probablemente el martes tengamos 140», afirma Jaume Llistosella.

Siquier, no obstante, no es tan optimista, puesto que las condiciones del bosque no son las más óptimas, aunque espera regresar a Mallorca con una docena de nuevas especies localizadas en las Pitiusas y que no aparecen en el catálogo ya confeccionado. En el trabajo de campo realizado ayer en Santa Gertrudis encontraron cuatro especies fuera de catálogo, dos de las cuales conocidas de otros territorios y dos que deberán analizar más a fondo para identificarlas.

De entre las numerosas especies catalogadas en la isla, entre 40 y 50 son comestibles, aunque sólo media docena se pueden calificar como «excelentes». A pesar de las malas condiciones del bosque, ayer aparecieron algunas de gran valor culinario, especialmente llanegues, una variedad que hasta hace pocos años apenas se valoraba en Ibiza.

El trabajo de los científicos

Los expertos micólogos que investigan las especies de las Pitiusas están acompañados habitualmente por un grupo de aficionados ibicencos que les apoyan en su trabajo científico. Éste se inicia en el monte, donde acuden provistos de cestos, igual que cualquier buscador de setas. Pero ellos no descartan ninguna pieza por pequeña, rara o desconocida que sea. Su siguiente misión es obtener de todas ellas fotografías de buena calidad. Asimismo, las clasifican y se las llevan para disecarlas y después realizar pruebas de laboratorio para conocer su composición. Aunque existen ya catálogos muy completos sobre las especies de Balears, suelen estar fotografiadas en diapositiva, por lo que los especialistas ahora desplazados a Ibiza aprovechan para obtener nuevo material en soporte digital, más práctico y con mayores posibilidades, asegura Josep Lluís Siquier. | P. R.