LAS PROTESTAS AGRARIAS

Dirigentes del PP critican el "descuido" del conflicto del campo para priorizar la amnistía

La rebelión de los tractores coincide con el desembarco de la Comisión de Venecia en Madrid y un pleno clave en el Parlamento Europeo sobre la amnistía. Cargos populares consideran que el partido ha tardado en reaccionar y que debió centrar el control al Gobierno en el asunto agrario

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante la primera sesión de control del año en el Congreso.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante la primera sesión de control del año en el Congreso. / EFE

Paloma Esteban

La ley de amnistía lleva meses acaparando toda la atención de la política española. El PP desplegó su ofensiva jurídica y política hace tiempo y esta semana recogían los primeros frutos: expertos de la Comisión de Venecia -un órgano dependiente del Consejo de Europa- desembarcaron el jueves en Madrid para recabar información sobre la norma mientras, casi al mismo tiempo, el Parlamento Europeo aprobaba una resolución en la que instaba a España a investigar los lazos de Carles Puigdemont con Rusia. Dos mensajes potentes, sobre todo el que sucedió en Bruselas, que también coincide con el estallido del conflicto del campo. Quizá el único asunto que ha desplazado la atención sobre el perdón a los delitos del procés.

La rebelión de los tractores llegó con días de retraso respecto a Europa, pero ha entrado en España por la puerta grande. Dos días de intensas protestas con retenciones y bloqueos en muchas carreteras, tomando el centro de Barcelona y con la idea de entrar en Madrid este mismo sábado. La Unión Europea ya ha tenido que dar marcha atrás a algunas de sus políticas verdes para relajar a los agricultores y los partidos de ultraderecha, como Vox, cogen oxígeno ante un asunto que forma parte de su ADN ideológico. Por eso, algunos dirigentes de peso del PP consideran que el partido “está tardando en reaccionar” “ha descuidado” el conflicto del campo, en plena efervescencia, por dar prioridad a la oposición a la amnistía, cuando este es un asunto que “no va a caducar” ni a salir de la agenda política.

El primer elemento de tardanza, reconocen, fue la sesión de control al Gobierno el miércoles. Alberto Núñez Feijóo abría el pleno preguntando al presidente por la amnistía, aunque terminó improvisando para mezclarlo con el malestar del mundo rural bajo la idea de que “si no ocurre en Cataluña o los implicados no tienen antecedentes penales”, no cuentan con la atención debida del Gobierno.

El líder del PP intentaba incluir el mensaje sobre los agricultores en su pregunta, sabiendo además que Santiago Abascal ya había registrado la suya y versaba, como demostró, sobre los problemas del campo en exclusiva.

Cinco dirigentes del PP -entre ellos Cuca Gamarra, Miguel Tellado o Rafa Hernando- se abalanzaron a continuación contra el ministro de Justicia, Félix Bolaños, con una batería de preguntas dedicada también a la amnistía y todas sus variables: los pactos, el terrorismo, la relación con el Kremlin y lo que aún está por venor. La estrategia estaba diseñada a propósito, pero algunos cargos creen que fue una equivocación no interrogar más al ministro de Agricultura, Luis Planas, o a otros miembros del Gobierno sobre el asunto que realmente afecta ahora al sector primario y que puede tener consecuencias en el resto de la población por los cortes en las carreteras o la falta de suministros en los supermercados.  

El PP había pensado ese esquema por tratarse de la primera sesión de control y en un momento de mucha debilidad para el Gobierno, después de que Junts tumbara la ley de amnistía sin aclarar qué exigirá para sacarla adelante. En este momento se mantienen en su enmienda que incluye todo el terrorismo y los delitos de alta traición dentro de la ley. Pero en el partido conservador consideran que no puede haber “falta de reflejos” priorizando en todo momento la amnistía y los pactos de Sánchez con los independentistas, ahora que los tractores de media España están tomando las carreteras. 

Todo se juntó de alguna manera: la visita de la Comisión de Venecia, propuesta del PP y en la que tienen puestas muchas esperanzas porque puede ser el primer pronunciamiento europeo sobre la amnistía, llegó también este jueves y viernes, coincidiendo con el máximo fervor de las protestas agrarias. Igual que el pleno del Parlamento Europeo donde tanto la portavoz popular, Dolors Montserrat, como el portavoz de Ciudadanos, Adrián Vázquez, tuvieron un papel clave para incidir en la trama rusa relacionada con el procés.

El temor de algunos dirigentes populares es que el partido no sepa reaccionar ante asuntos de envergadura mientras la amnistía llena cada debate político. “La amnistía va a continuar. Pero tenemos que ir calibrando, midiendo y adaptando el discurso”, reflexionan dos dirigentes nacionales.

La cita electoral más inmediata, la gallega, también centra todo el esfuerzo del partido. Feijóo viajó el jueves a Galicia y estará todo el fin de semana, como ocurrió el anterior. Es cierto que en el partido aseguran que el conflicto del campo no está teniendo los mismos efectos en esa comunidad que en la mayoría. Y el líder del PP se reunió precisamente ayer en Mazaricos, en la provincia de A Coruña, con agricultores y ganaderos para abordar las problemáticas principales. En el Congreso y el Senado, sin embargo, toda la atención del PP estuvo puesta en la ley de amnistía un día más.