El mercado alemán fue el único que bajó en la estadística del año pasado del aeropuerto de Ibiza

Las estadísticas del aeropuerto de Ibiza son el mejor y más fiable indicador de la actividad económica de las Pitiusas. Y sobre la evolución de los diferentes mercados turísticos con los que trabajan los profesionales de todos los sectores de las islas.

Las estadísticas del tráfico generado en la terminal de es Codolar durante todo el pasado año dejan varias lecturas. La primera, que el covid, que en 2020 obligó a confinar a toda la población y que condicionó la economía de ese y del año siguiente, ha actuado de improvisado revulsivo del turismo en Ibiza y Formentera. Las islas no sólo se han recuperado del hachazo de la crisis sanitaria sino que han salido más reforzadas.

Y lo demuestra el hecho de que el aeropuerto, desde 2022, está batiendo todos las marcas que tiene en su estadística AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea) desde que hay registros.

La otra lectura se hace más en clave turística, sobre cómo afecta las variaciones que registra la principal industria pitiusa en la actividad aeroportuaria (salvando, cómo no, las líneas entre las islas y con la Península).

En el apartado de tráfico por nacionalidades, la estadística de AENA señala que el mercado alemán, el cuarto con más peso en la terminal ibicenca, es el único que registra un descenso del número de pasajeros con origen o destino en Ibiza. En concreto, baja en un 4,2% con respecto a 2022 al pasar de los 668.645 a los 640.487 viajeros en este periodo de un año.

El resto de nacionalidades más relevantes para Ibiza y Formentera desde el punto de vista del tráfico aéreo arrojan saldos positivos.

La primera sigue siendo la nacional, que acumuló en 2023 un tráfico de 3.785.091 de pasajeros en es Codolar (un incremento del 10,4%). En el caso de los nacionales, hay que tener en cuenta que la estadística también incluye el tráfico doméstico, esto es, de los residentes con otros destinos del territorio español.

Por este motivo, el tráfico aéreo nacional duplica al segundo más relevante para las islas, el británico. El principal mercado emisor de turistas hacia Ibiza y Formentera contabilizó el año pasado un movimiento total de 1.850.080 viajeros, lo que representa un incremento del 9,4% con respecto a los resultados de 2022, cuando la cifra se situó en 1.691.245, según siempre la estadística de AENA.

El tercer destino en importancia para el aeropuerto ibicenco es el italiano, que también registró en 2023 un fuerte aumento, en este caso del 12,2% al pasar de los 807.404 viajeros de hace dos años a los 905.578 del pasado ejercicio.

Mercados al alza

Los ciudadanos de Países Bajos siguen muy interesados en viajar a las Pitiusas, ya que su número crece desde hace ya varios años de manera continuada. En el balance del año pasado, se indica que generó un tráfico de 611.700 viajeros, una cifra un 11,2% superior a la de un año antes (550.327). Mantiene por lo tanto la tendencia al alza que ha convertido a este mercado en uno de los principales para la isla, cuando hasta hace apenas unos años era prácticamente residual.

Al francés le ocurre algo muy similar a los holandeses. Su aportación al tráfico aéreo y al turismo en las Pitiusas está cobran una relevancia importante. Ahora, con 366.373 visitantes durante los doce meses del año pasado, se convierte en el sexto mercado en importancia para las islas. De hecho, su crecimiento fue del 4,7% con respecto a 2022.

Suiza (con 250.480 viajeros y un incremento del 12,9%, uno de los más importantes), Bélgica (162.713 y un aumento importante del 10,7%), los vecinos de Portugal (124.668 y una tremenda subida del 23,2%) y Austria (104.768 pasajeros, un 69,6%, el aumento más destacado con diferencia), cierran el listado de las diez nacionalidades con mayor peso en el tráfico aéreo de Ibiza y Formentera, siempre según los datos facilitados por AENA, correspondientes a la estadística de 2023.

El doble de pasajeros que hace 17 años

El covid, curiosamente, ha sido un revulsivo para el turismo y, como es lógico, para el tráfico aéreo

Con la saturación que sufre Ibiza durante gran parte de la temporada de verano, los continuados incrementos en el tráfico de pasajeros en el aeropuerto no son bien recibidos por todos. El turismo está creciendo sobre todo, curiosamente, desde el final de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Y como es lógico, eso redunda en un aumento de la actividad en la terminal de es Codolar, que parece quedarse más pequeña cada año.

De hecho, y según siempre los datos de AENA, que son los oficiales, el aeropuerto gestionó el año pasado su cifra de viajeros más elevada desde que hay registros, o lo que es lo mismo, de la historia de la aviación comercial en las Pitiusas. Se elevó a 8.931.598 pasajeros (de entrada y salida), muy por encima de los 8.156.708 de 2022 y los 8.155.626 de 2019, el último ejercicio antes del bofetón del covid. Pero es que este total es el doble del que se registró en 2006, hace apenas 17 años. Entonces, los profesionales del aeropuerto gestionaron el paso de 4.460.143 usuarios, aunque hubo que esperar hasta 2010 para que se superase la barrera de los cinco millones: 5.040.800. Los seis millones se dejaron atrás poco después, en 2014 (6.212.198), y los siete en 2016, cuando se contabilizaron 7.416.161 pasajeros. Los ocho millones se alcanzaron en 2018 y a este ritmo, este ejercicio de 2024 se superarán los nueve millones.

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