Menos parados que nunca en Ibiza en diciembre

Las Pitiusas jamás tuvieron tan pocas personas apuntadas en el SOIB durante el mes de diciembre en su reciente historia, ni siquiera en los años de bonanza, entre 2005 y 2008. Únicamente hay 3.162 desempleados entre ambas islas, 3.010 en Ibiza (391 menos que hace un año, es decir, un 11,5% de diferencia) y el resto, 152, en Formentera (17 más que en diciembre de 2022, lo que supone un incremento del 12,6%). Hay que tener en cuenta que es menos de la mitad de los parados registrados, por ejemplo, en 2006, en pleno boom del ladrillo y cuando había 44.000 habitantes menos en las Pitiusas. En Mallorca (-11,7%) y en Menorca (-11%) también hay menos ciudadanos sin empleo.

La cifra del paro de larga duración (cuando se acumula más de un año sin ser contratado) sigue a la baja en ambas islas: se ha reducido hasta las 857 personas, cerca de la cantidad prepandémica, en 2019, cuando se contabilizaron 824 desempleados de larga duración. Sólo hubo menos entre 2005 (686) y 2008 (769) en los últimos 18 años. El 44,7% (383 pitiusos sin empleo) lleva sin trabajar entre uno y dos años, y el resto, el 55,3% (474), más de dos años si cobrar un sueldo.

Desciende el número de parados respecto a hace un año en todos los sectores de Ibiza: un 7,4% en agricultura, un 9,5% en el ladrillo, un 7,4% en la hostelería (un 40% en Formentera), y un 14,4% en el comercio.

Contrataciones

Respecto a las contrataciones, se firmaron un total de 2.126 en este archipiélago (2.030 en Ibiza, un 7% menos que en 2022, y 96 en Formentera, casi un 12% menos), unos 170 contratos menos que hace un año, lo normal teniendo en cuenta que cada vez es mayor el número de trabajadores indefinidos y menor el de empleos temporales. En Mallorca (-11,4%) y Menorca (-5,5%) también hubo menos contrataciones en términos interanuales.

La mayor parte de los nuevos contratos, 1.597 (que suponen el 73,3% del total), son indefinidos (la mayor cantidad de la historia junto a los que hubo en 2023, cuando se alcanzaron los 1.645), y únicamente 239 tienen una duración inferior a un mes, cuando en 2017 llegaron a representar el 44,6% del total.

Fijos y temporales

La temporalidad sigue, pues, camino de ser testimonial. Así, de esos 1.597 empleos fijos, 793 fueron indefinidos a tiempo completo (la segunda mayor cantidad de toda la historia en diciembre) y 137 a tiempo parcial, mientras que 667 (la cifra más elevada de los últimos 18 años en ese periodo) fueron fijos discontinuos. Se mantiene, pues, la mejora de la calidad del empleo gracias a la reforma laboral emprendida hace un par de años.

Coincidiendo con la campaña navideña, los contratos en el comercio se incrementaron un 4,6% en Ibiza, mientras cayeron un 14,4% en la hostelería y un 6,3% en la construcción.

Buenas perspectivas para 2024

El conseller de Empresa, Empleo y Energía, Alejandro Sáenz de San Pedro, celebra los «verdaderamente buenos» datos de afiliación y paro y expresa su confianza en que Balears siga liderando la creación de empleo, poniendo el acento en mejorar la calidad de los puestos de trabajo.

En una rueda de prensa junto a la directora general de Trabajo y Salud Laboral, Cati Cabrer, Sáenz de San Pedro señaló que espera que las buenas perspectivas se mantengan también en los primeros meses del año atendiendo a un probable inicio temprano de la temporada turística por la celebración a finales de marzo de la Semana Santa.

Cabrer, por su parte, califica como históricas las cifras de paro y afiliación del año que acaba de terminar. Según señala, la reducción interanual del paro ha sido del 21,8% frente a la media nacional del 6,6%, un dato muy significativo considerando que la reducción del año 2022 fue mayor al tratarse de un contexto de salida de la crisis del covid.

La presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), Carmen Planas, valoró las cifras de afiliaciones, paro y contratación y ensalzó la campaña navideña que, «impulsada por el comercio local y la restauración, permite seguir liderando la caída del paro», pero advierte de que «la inflación, la subida de impuestos y la desaceleración de la economía nacional y europea pueden afectar al mercado laboral».

Por su parte, CCOO pide «aprovechar el momento» y la coyuntura económica actual para fomentar el cambio de modelo en las islas hacia una economía «social y medioambientalmente sostenible», con «mecanismos que mejoren la calidad de los puestos de trabajo que permitan erradicar la figura del trabajador pobre».