El proyecto de Ca n’Escandell es una «maniobra especulativa», dice el GEN

El grupo ecologista GEN-GOB ha dirigido un escrito a la Comisión de Medio Ambiente de Baleares (CMAB) en el que le exige que «emita informe ambiental desfavorable» al proyecto de urbanización de la zona de Ca n’Escandell, en el municipio de Ibiza, que contempla la construcción de 532 Viviendas de Protección Oficial (VPO), un parque y dos equipamientos: un instituto y un campo de fútbol municipal.

«La sobreexplotación de los recursos hídricos de la isla es un hecho incuestionable que parece que se quiere obviar para facilitar esta nueva maniobra especulativa», critican los ecologistas en un comunicado con respecto a la tramitación del proyecto de Ca n’Escandell.

En su escrito dirigido a la CBMA, los ecologistas pitiusos exigen que se «rechace la posibilidad de contar con aguas no potables y de acuíferos sobreexplotados como recursos hídricos válidos a la hora de justificar la suficiencia y conveniencia de éstos para el proyecto propuesto». Y reclaman que se incorporen al proyecto los informes que solicitaron en las alegaciones que presentaron ante el mismo organismo en septiembre del año pasado.

Estos estudios están relacionados con la vibilidad enérgetica, actual y futura, del proyecto, así como por la disponibilidad real de los recursos de agua para abastecer a los nuevos usuarios «con una evaluación completa de la demanda, no sólo de los niveles piezométricos (al perforar un pozo en un acuífero confinado, el agua se descomprime y asciende por la entubación hasta alcanzar una posición situada por encima del techo del acuífero) de los pozos, sino de su explotación y capacidad de carga».

La capacidad de carga de la isla

También reclamaban en sus alegaciones otros estudios sobre la «afectación de superficie agrícola susceptible de cultivo», sobre la «capacidad de carga poblacional y turística de la isla» y sobre «los costos asociados al tratamiento de los fangos procedentes de las estaciones depuradoras de la isla y la viabilidad económica para incrementar su producción».

Además, proponían un análisis sobre la capacidad de la planta de tratamiento de residuos» del vertedero insular y de alternativas al propio proyecto, que incluía la compra de vivienda en el municipio por parte de las administraciones.

Desde el GEN-GOB lamentan ahora que ninguna de estas alegaciones se hayan incorporado al proyecto por parte de la Comisión Balear de Medio Ambiente, hecho que, consideran, «permite concluir que no se han tenido en cuenta ni las más elementales cuestiones a la hora de racionalizar la planificación territorial» en la isla.