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Los residentes en Formentera no pagarán por el transporte público

El Consell adjudicará las 50 plazas que prevé la ley turística para la comercialización de estancias en viviendas

Un momento del pleno ordinario del Consell de Formentera. | CIF

El Consell de Formentera bonificará la totalidad del coste del billete de autobús a los usuarios residentes en la isla desde el 1 de septiembre hasta el 31 de diciembre. Esta decisión, aprobada ayer por unanimidad en la sesión plenaria ordinaria del mes de agosto, extenderá la ayuda para todos aquellos que vivan fuera de la isla, aunque en este caso tan solo alcanzará el 70% del precio de los abonos y de los títulos multiviaje durante el mismo periodo.

El plenario informó de que los subsidios que alcancen el 100% del coste del billete estarán financiados en un 20% por la Administración balear, en un 30% por el Gobierno central y en un 50% por el Consell. Por otra parte, los que cubren el 70% mantendrán los mismos porcentajes a excepción del que aportará la institución insular, que se limitará al 20%. El conseller de Movilidad, Rafael González, anunció que ya han iniciado las conversaciones con la empresa concesionaria del transporte para tratar los pormenores de la aplicación de esta ayuda.

Un momento del pleno ordinario del Consell de Formentera CIF

El Consell también decidió conceder subvenciones a los residentes para la adquisición de bicicletas. Estas ayudas se adjudicarán a partir del próximo 16 de septiembre y aún no se ha informado acerca de la bonificación que supondrán para los compradores.

El bloque de la oposición recordó que esta campaña ya se realizó el año pasado sin mucho éxito, por lo que pidió una revisión de las bases para acceder a esta ayuda.

González explicó que, con la aplicación de las dos subvenciones al transporte, «las ayudas pueden llegar a todos los habitantes de nuestra isla, teniendo en cuenta que gran parte de la población local vive en viviendas diseminadas».

50 plazas turísticas

El Pleno aprobó la distribución y condiciones para la adquisición de 50 plazas turísticas, en cumplimiento de la nueva legislación balear sobre la sostenibilidad y circularidad del sector. Aunque la normativa restringe la compra de plazas, permite una excepción para que la isla conceda este medio centenar y así recompensar las inversiones de familias y pequeñas empresas de la isla.

A pesar de que esta medida contó con los apoyos de todos los grupos políticos, Sa Unió criticó la moratoria en la adjudicación de las plazas y la ley turística, que consideró «una injerencia de Balears en Formentera». Alejandra Ferrer, la consellera de Ordenación Turística, contestó que le hubiese gustado «tener más poder de decisión», pero que su intención es que «el impacto del alojamiento turístico sea lo menor posible».

El Consell de Formentera aseguró que los interesados pueden realizar la solicitud en un plazo de diez días desde la aprobación de la medida y que, en caso de que no todos los permisos se concediesen, se volvería a abrir el periodo de tramitación. Durante el proceso de adjudicación tendrán prioridad aquellas peticiones que cumplan con los criterios de sostenibilidad acordes con el Plan de Calidad aprobado por la institución insular.

Demarcación de Costas

Por último, el pleno aceptó, a instancias de Sa Unió, solicitar a la Demarcación de Costas que restaure las pasarelas de madera, los paneles informativos, las protecciones de dunas y otros elementos que están deteriorados. Además, se pedirá a la misma institución que instale pérgolas fotovoltaicas en los aparcamientos cercanos a las playas para ofrecer puntos de carga a vehículos eléctricos.

El conseller de Medio Ambiente, Antonio Tur, indicó que ya conocía las reivindicaciones, y explicó: «La Demarcación de Costas no ha avanzado tan rápido como hemos pedido».

El Consell apuesta por «la gratuidad y universalidad de la educación Infantil»

La subvención total de la cuota de matrícula anual de las guarderías públicas durante el próximo curso escolar fue admitida por unanimidad en el pleno del Consell de Formentera celebrado ayer.

Por otra parte, el plenario aprobó una reducción de la «cuota de servicio» de estos centros para primero y segundo de educación Infantil en el horario de 9 a 13 horas.

Estas ayudas extenderán a las familias monoparentales la bonificación del 30% de la cuota de las guarderías que ya se concedió a las numerosas.

La consellera de Juventud, Vanessa Parellada, afirmó que se deben impulsar desde todas las administraciones «las políticas educativas para llegar a la gratuidad y universalidad de la educación de primer ciclo de la etapa de Infantil».

Durante el pleno ordinario, el equipo de gobierno aceptó de manera inicial el Reglamento de establecimiento de criterios de autorización y acreditación para los centros de atención infantil.

Este texto de ámbito autonómico establecerá una nueva normativa que regulará los criterios de autorización de escuelas no gestionadas por la conselleria de Educación. Antes de su aplicación, está previsto un periodo de adaptación para los centros afectados.

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