El Ayuntamiento de Ibiza presentó ayer el proyecto Regenerate, financiado por la Unión Europea y que se basa en establecer oficinas para fomentar la rehabilitación de viviendas, favoreciendo la eficiencia y evitando la pobreza energética, dos pilares en la lucha contra el cambio climático.
Esta iniciativa también servirá para canalizar los fondos de Next Generation que llegarán para la rehabilitación de las viviendas de las islas. Para ello, las oficinas servirán para dinamizar y fomentar esta rehabilitación, «que tan necesaria es para combatir el cambio climático y la polución energética que hay a consecuencia de la subida de precio de la energía en estos momentos », declaró el concejal de Vivienda de Vila, Aitor Morrás.
La oficina de Ibiza estará dentro del edificio Cetis y servirá como oficina de acompañamiento e información y para dinamizar la rehabilitación. Está «muy cerca» de abrirse, afirmó el concejal.
Precisamente ayer el concejal informó de la celebración del tercer encuentro del Consorcio Regenerate, en el edificio Cetis. Además de Morrás, asistieron la consellera de Menorca y el director general del sector en Palma, Cristina Gómez y Josep Maria Rigo.
«Hemos llegado a un punto en que en las islas estamos empezando a funcionar con una especie de autonomía propia», explicó la consellera menorquina, ya que no hay necesidad de que administraciones que «estén por encima» lideren proyectos.
Europa está apostando por la neutralidad climática para 2050, pero «nos coge en un momento de crisis de todo el sector energético», indicó por su parte Gómez. La consellera admitió que siempre dice la misma frase: «El kilovatio más eficiente y más barato es ese que no consumimos».
La estrategia de este proyecto es dejar de consumir electricidad y que los mínimos que se consuman sean con energías renovables. Estas han entrado «a saco», según la consellera, quien recalcó que con las energías renovables solo habría que consumir la energía imprescindible y esta es «esa que no queremos dejar de consumir después de haber hecho rehabilitación energética».
El director general remarcó la importancia del papel de las entidades locales para crear las oficinas con el presupuesto de la Unión Europea: «Si no somos capaces de crear estas oficinas de información para facilitar la vida de los ciudadanos, estos fondos no se ejecutarían».
Los fondos que recibe Ibiza ascienden a 192.840 euros y se destinarán a financiar el personal que haga el trabajo «de fomentar, con las comunidades de propietarios y los particulares, la rehabilitación tanto de edificios como de viviendas», explicó Morrás.
Menorca ha recibido 400.000 euros y Palma 700.000 para financiar al personal durante los cuatro años que dura el proyecto europeo, calificado «de éxito» por Gómez. «No son subvenciones a fondo perdido, te obligan a movilizar capital. Por cada euro que nos han dado, debemos movilizar 15 euros más», aclaró la consellera.
Fondos Next Generation
Este retorno de la inversión puede proceder del sector privado, del dinero ahorrado por la gente, porque está financiado o porque «son capaces de generar una acumulación de subvenciones», recalcó Gómez.
Los fondos Next Generation, que tienen como objetivo reparar los daños económicos y sociales causados por la pandemia, servirán para financiar y subvencionar las obras.
Con una herramienta que permite calcular las subvenciones, apuntó la consellera, «estudiaremos el máximo subvencionable para intentar que cada familia y cada persona pague lo menos posible». «Ahora comienza la aventura», concluyó.
El proyecto significa un estímulo para la renovación residencial, según una nota del Consistorio ibicenco, y ha recibido 1,8 millones de euros de financiamiento de la Comisión Europea y una puntuación de 14 sobre 15 puntos posibles. Además, se ha subvencionado el 100% de lo solicitado, siendo una de las mejores propuestas de las 29 presentadas a la Comisión Europea, añade Vila.
