Durante tres días, desde el lunes 23 al miércoles 25 de mayo, el jefe del Servicio de Bomberos de Ibiza, Miguel Sevilla, ha impartido una formación teórico práctica sobre la teoría del fuego y actuación frente a él en el que han participado 40 profesionales del centro de salud Sant Antoni, según ha informado el Área de Salud de Ibiza y Formentera en un comunicado.
La formación ha culminado con un ejercicio de simulacro de incendio en un archivo de la zona del cuarto de cuadro eléctrico, que no ha podido ser controlado en un primer momento ni por los equipos de primera intervención ni por los equipos de segunda intervención. Por ello, ha sido necesaria la ayuda exterior.
En el simulacro, el incendio que ha comenzado a las 12 horas se ha extendido y ha requerido la participación externa, avisada por medio del servicio de emergencias 112, del Servicio de Bomberos de Ibiza.
Plan de autoprotección
El Área de Salud de Ibiza y Formentera explica que continúa así la formación del personal, dentro del plan de autoprotección, para la actuación ante una emergencia provocada por fuego tras los anteriores simulacros de incendio en el Centro de Salud Vila, en el Hospital Can Misses. Los últimos se han realizado en el helipuerto, en la lavandería y en la UCI, y en el Hospital de Formentera.
Estas actuaciones forman parte de la implantación del Manual de autoprotección del Área de Salud de Ibiza y Formentera, entre cuyos objetivos están formar e informar a todo el personal en el protocolo de actuación según el equipo de emergencia al que pertenecen, conocer la ubicación de los medios de protección y las vías de evacuación, mantener libre de obstáculos las áreas próximas a los medios de protección, atacar el siniestro en el momento en que se detecte hasta que se reciba la orden de evacuación o llegue un relevo exterior, y conocer los puntos de reunión en el exterior de las instalaciones.
Tres fases
El simulacro ha constado de tres fases: preparación, ejecución y evaluación (fase de juicio crítico). Para la última fase se ha creado "un equipo multidisciplinario de árbitros, formado por personal de los servicios técnicos del Área de Salud y de la dirección, representantes sindicales, que actúan como observadores, y un técnico de la Unidad Básica de Prevención de Riesgos Laborales, cuyo cometido es observar cómo se lleva a cabo el simulacro y qué factores negativos se aprecian, para corregirlos posteriormente", detallan desde el Ib-Salut.
Después del simulacro se redactará un informe que "contiene el análisis y las propuestas de mejora". El director del simulacro ha sido Victor Fernández Jaraíz, jefe del Servicio de Seguridad de los profesionales de Ib-Salut.
