Las de los senadores por las Pitiusas son las retribuciones, tras la de Hernanz y Ruiz, que más han aumentado en estos tres años, un 12,07%, según los datos que recoge la plataforma de transparencia de Newtral. La socialista Patricia Abascal y el popular José Vicente Marí Boso cobran ahora mismo poco más de 86.000 euros brutos al año (6.143,2 al mes). Su predecesor en el cargo, Santi Marí percibía en 2019 más de 9.000 euros menos al año: un total de 76.741,7. El salario mensual de los senadores incluye 1.958 euros en dietas y otros 1.134,5 en complementos.
La subida que han experimentado respecto a sus antecesores no tiene nada que ver con la que registran los diputados de la oposición, Miguel Jerez (PP) y Patricia de las Heras (VOX), respecto a Marí Bosó, que era quien ocupaba este puesto en el mandato previo: un 5,19%, de 81.776,24 euros brutos anuales a 86.024,9. Se da la curiosa circunstancia de que con el cambio de diputado a senador Marí Bosó ha salido perdiendo. Si siguiera en la Cámara Baja cobraría 20 euros más de los que percibe en la Alta.
Parlament balear
Gloria Santiago (Unidas Podemos), vicepresidenta del Parlament balear, es la representante de las Pitiusas en la Comunitat Autònoma con la retribución más elevada, señala la web: 67.449,9 euros brutos anuales (4.817,85 al mes). Le sigue, aunque con muy poca diferencia, el conseller balear de Movilidad y Vivienda, el ibicenco Josep Marí Ribas Agustinet, que percibe 66.971,37 euros al año.
El sueldo del único conseller pitiuso en el equipo de gobierno es más elevado que lo que percibían en la anterior legislatura las también conselleras ibicencas Pilar Costa (Presidencia) y Fanny Tur (Cultura, Participación y Deportes): 58.461 euros brutos al año. Es decir, el sueldo del conseller es un 14,5% superior al de la pasada legislatura. Hay que recordar que el conseller comenzó el mandato como alcalde de Sant Josep puesto al que renunció en febrero del año pasado, cuando entró a formar parte del gobierno de Francina Armengol, que reestructuró su equipo, del que salió la también ibicenca Pilar Costa, que, además, ejercía como portavoz. Esto ha supuesto que el josepí y presidente de la Federación Socialista de Ibiza ha visto esta misma legislatura cómo su nómica aumentaba un 24%: de los 54.000 de la retribución como alcalde a los casi 67.000 como conseller. Eso sí, es un 19,3% menos que lo que percibía Costa: 82.971,37 euros brutos al año.
La mayoría de los diputados pitiusos en el Parlament balear (Helena Benlloch, Enric Casanova, Irantzu Fernández, Mariano Juan, Tania Marí, Virginia Marí y Jordi Marí Tur) cobran 57.949,9 euros, cifra que apenas ha variado respecto a la anterior legislatura: un 2,8% más. Algo más, 63.907,6 euros, perciben el popular Toni Costa (PP), que ejerce como portavoz de su grupo, y el diputado por Formentera, Antonio J. Sanz (PSOE). El portal no ha actualizado la retribución del también diputado por Ibiza Maxo Benalal, que llegó al Parlament balear con Ciudadanos, partido que le expulsó por la polémica por el supuesto cobro irregular de dietas. La web de transparencia de la propia institución detalla que el pasado mes de marzo percibió 4.144,34 euros, la segunda asignación parlamentaria más baja.
Aunque la web no incluye datos de los consells de esta legislatura, sí figura el sueldo que percibía el presidente insular en la pasada, Jaume Ferrer: 52.950 euros brutos anuales. Una cifra que es exactamente la misma que, según el portal de transparencia del Consell de Formentera, cobra la actual presidenta, Ana Juan, lo que indicaría que no se han subido el sueldo.
