El abogado de los vecinos de los Apartamentos Don Pepe, Juan Nadal, y la presidenta de la comunidad, Silvia Hernández, han asegurado esta mañana que "más del 90%" de los propietarios está a favor de la permuta que les ofrece el Govern balear para construirles nuevas viviendas, mientras que los que se muestran indecisos aceptarán esta propuesta cuando quede plasmada por escrito en un documento oficial. Los representantes de los vecinos han mostrado este convencimiento durante la presentación de la "Comisión de seguimiento para la solución habitacional y urbanística de los Apartamentos Don Pepe y la recuperación ambiental de la zona de es Codolar", de la que, además de los propietarios, forman parte el Govern balear, el Ayuntamiento de Sant Josep y el Consell de Eivissa.
Por su parte, el conseller autonómico de Vivienda, Josep Marí Ribas, Agustinet, ha mostrado su confianza en que, antes de finales de año, ya se haya firmado el conviene entre la administración y los vecinos que plasme el acuerdo para esta reubicación. Según ha avanzado Marí, en una comparecencia en las oficinas municipales de Sant Jordi junto al resto de componentes de la comisión, uno de los primeros pasos que deben cumplir es «poner encima del papel un protocolo de intenciones» en el que las dos partes, las administraciones y la comunidad de propietarios, garanticen que van a cumplir con el intercambio de terrenos necesario para construir las viviendas. «Antes de que acabe el año, queremos tener ya el convenio con el compromiso [para llevar a cabo este proyecto de reubicación]».
Los dos bloques
El representante legal de los propietarios ha valorado que «ya se marca una línea de trabajo». «[Los propietarios que han mostrado dudas] son casos muy puntuales y, más que opiniones contrarias, tienen dudas que tenemos que aclarar», indicó Nadal.
La propuesta del Govern no solo afecta a los propietarios de la cincuentena de apartamentos del bloque A de los Don Pepe, que ya ha sido desalojado porque no existe la licencia de construcción de los años sesenta, sino que también propone nuevas viviendas para los del bloque B si acceden a ceder el terreno para demoler el inmueble.
El alcalde de Sant Josep indicó en el último pleno que la reubicación de los vecinos costaría entre 13 y 15 millones de euros
En este último caso, el edificio sí que cuenta con el correspondiente permiso, pero acabaron construyéndose cinco plantas cuando tenía autorización para cuatro, por lo que el piso superior también se encuentra fuera de ordenación.
Dar forma a la propuesta
Tras constituir esta comisión, y a falta del acuerdo unánime de los propietarios, quedan por perfilar las distintas actuaciones para reubicarlos. Así, en estos momentos, el Ayuntamiento de Sant Josep continúa buscando un terreno para levantar las nuevas viviendas, entre Sant Jordi y Platja d’en Bossa. Según ha detallado el alcalde, Ángel Luis Guerrero, ahora se está valorando el precio del metro cuadrado para preparar el concurso para adquirir el solar.
En el último pleno municipal, Guerrero indicó que el coste de toda la operación podría sumar entre 13 y 15 millones de euros. No obstante, esta mañana Agustinet ha precisado que todo el montante de la operación aún está por valorar, tanto del nuevo edificio como de los dos que se derribarían. El Ayuntamiento sería el responsable de levantar las casas, mientras que el Govern redactaría el proyecto de construcción.
El Consell ha mostrado su disposición a agilizar la recalificación de los terrenos para las nuevas viviendas
La financiación por parte de cada administración «se ha de ir viendo», aunque Marí ha avanzado que el Govern tiene la voluntad de «encontrar fondos» y de que sea «una operación aceptable económicamente para los propietarios», en caso de que estos tuvieran que aportar alguna cantidad en función de la diferencia de valor de las propiedades.
El suelo que propone Sant Josep es rústico, por lo que necesita recalificación como urbano. En este sentido, el conseller de Territorio de Eivissa, Mariano Juan, ha subrayado que el Consell agilizará esta «compleja y difícil tramitación». Para ello propone, como vía más rápida, incluir esta recalificación dentro de las normas transitorias que el Consell prevé aprobar para Sant Josep hasta la redacción de su Plan General de Ordenación Urbana.
Dos comisiones para buscar una solución a los afectados
La comisión de seguimiento que nace para facilitar la reubicación de los vecinos del Don Pepe, a partir de la propuesta del Govern para permutar los dos edificios de es Codolar, contará con representantes de todas las administraciones implicadas, además de los vecinos, así como de una comisión paralela de carácter técnico.
Por parte del Govern balear, estarán representadas la consellerias de Vivienda, Medio Ambiente y Presidencia, cada una con un miembro. Además, la comisión de seguimiento contará tanto con el presidente del Consell de Eivissa, Vicent Marí, como con el alcalde de Sant Josep, Ángel Luis Guerrero. Además, Marí y Guerrero nombrarán cada uno de ellos a un segundo componente.
Por último, los vecinos afectados estarán representados por su representante legal, el abogado Juan Nadal, y la presidenta de la comunidad de propietarios, Silvia Hernández. La comisión de seguimiento, creada ayer mediante un decreto del Consell de Govern balear, queda adscrita a la conselleria de Presidencia.
Sus objetivos incluyen «las actuaciones necesarias para dar solución a las viviendas para los vecinos de los Don Pepe e impulsar las medidas necesarias para restablecer los valores ecológicos en toda la zona [de es Codolar]. «Con estas dos comisiones, el Govern espera avanzar en las cuestiones técnicas para hacer posible una solución para los vecinos», destaca el Ejecutivo.
