El doctor Antonio Ángel Trias Garau (Palma, 1959) ha fallecido este domingo tras no poder superar una infección por covid-19 que le mantenía ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos de Son Llàtzer desde hacía unos 42 días. La pérdida del doctor Trias, que ejercía como intensivista en el hospital de Manacor, ha dejado consternados a sus compañeros del centro comarcal así como al Col·legi Oficial de Metges de les Illes Balears (COMIB), institución que ha lamentado profundamente el fallecimiento y ha trasladado sus más sentidas condolencias a los familiares, amigos y compañeros de profesión del médico.  

Este especialista en Medicina Intensiva del Hospital de Manacor, con una amplia trayectoria profesional desde su colegiación en Balears en julio de 1984, se ha convertido en la tercera víctima de esta pandemia entre el colectivo médico.

El pasado 13 de enero se produjo el fallecimiento de la doctora Nedialka Veleva, que murió a los 68 años de edad en el Hospital Universitario Son Espases, donde llevaba ingresada 4 días a causa de la enfermedad. Nacida en 1952 en Bulgaria y con nacionalidad española, llevaba colegiada en Balears desde 1995. Nedialka Veleva, especialista en Ginecología y Obstetricia, trabajaba en un centro sanitario privado de Palma.

Unos meses antes, en agosto de 2020, fallecía asimismo el doctor Bernd Kablitz, especialista en Cirugía General y Aparato Digestivo nacido el 30 de diciembre de 1960 en el estado de Hessen (Alemania). Se colegió en el Col·legi de Metges de les Illes Balears en diciembre de 2008 para ejercer la medicina privada en Mallorca, atendiendo principalmente a pacientes extranjeros.

En el momento de su defunción realizaba guardias puntuales en la clínica Rotger Quirónsalud de Palma, aunque tenía su propia consulta y atendía también en centros privados de la part forana de Mallorca como el Hospital de Llevant. Tenía fijado su domicilio en la localidad mallorquina de Son Servera.

El Dr. Bernd Kablitz dio positivo en covid-19 tras una PCR que se realizó después de presentar sintomatología leve, por lo que los médicos decidieron que se mantuviera en aislamiento domiciliario con seguimiento telefónico. Tras un empeoramiento repentino, falleció por insuficiencia respiratoria en su domicilio. Era una persona deportista, competidor en natación y no presentaba ninguna patología previa. Dejó esposa y dos hijos.