El conseller de Ordenación Turística y Lucha contra el Intrusismo, Mariano Juan, ha revelado que tanto el Consell como los ayuntamientos y la Dirección Insular de la Administración General del Estado en Ibiza y Formentera llevan semanas reuniéndose «con discreción» para tratar el problema de las fiestas ilegales. «Tenemos un objetivo claro: que no se perjudique la situación sanitaria de Ibiza con estas fiestas que organizan piratas, en muchos casos profesionales y, en la mayoría de veces, extranjeros», subrayó en rueda de prensa el conseller.
A raíz de las actas levantadas hasta el momento y de las pesquisas policiales, se constata que esta industria clandestina de ocio está controlada por «grupos organizados que vienen de fuera y que mueven mucho dinero», indicó el representante del Consell.
Venta de entradas
Mientras que en años anteriores se pagaba en el momento de acceder a la fiesta, ahora los organizadores recurren a las redes sociales y cobran con anterioridad para enviar la localización de las viviendas en el último momento. «Los clientes se captan, sobre todo, en establecimientos turísticos, cuando buscan dónde continuar tras la última copa».
«Van cambiando su forma de actuar y es una lucha permanente», subrayó Juan. En este sentido, se mostró especialmente crítico con los mensajes de «políticos que salen diciendo que no se puede hacer nada en el domicilio». «Parece que estén asesorando a los infractores de cómo deben actuar y qué es lo que deben decir para que la policía no pueda ejecutar su trabajo», lamentó.
