La historia de Gilmar, un profesor de capoeira brasileño residente en Ibizaque sufrió en diciembre un ictus, ha conmovido a centenares de personas, que han decidido prestarle apoyo económico mientras se recupera a través de la plataforma GoFundMe.
El crowdfunding para ayudar a Gilmar, que se encuentra hospitalizado en Mallorca, se puso en marcha hace siete días y hasta ayer a las 18 horas había recibido 10.219 euros de 270 donantes. La cifra recaudada supera en casi 8.000 euros a la cantidad que inicialmente se solicitaba, 2.400 euros.
Sol Hale, que es la persona que organiza esta recaudación de fondos, explica con detalle a través de GoFundMe cuál es la situación del brasileño.
El pasado 16 de diciembre Gilmar empezó a encontrarse mal mientras impartía una clase de capoeira. Le diagnosticaron un infarto cerebral transitorio. Su estado de salud fue empeorando a medida que transcurrían los días. A través de un TAC se confirmó que el brasileño había sufrido un infarto cerebral irreversible, es decir, un ictus. En ese momento «ya no conseguía mover su lado derecho ni hablar»,señala la información publicada en la plataforma estadounidense, dedicada a recaudar fondos para particulares, grupos u organizaciones.
Ya ha transcurrido más de un mes desde el accidente y Gilmar, detalla Hale, «está aprendiendo de nuevo a hablar y ya ha logrado ponerse de pie y dar algunos pasos». Según explica la persona impulsora de esta iniciativa de micromecenazgo, el brasileño, «que fue trasladado de urgencia a un centro hospitalario de Mallorca», estará durante dos meses en un departamento de Neurorrehabilitación de esta isla.
El llamamiento solidario para conseguir fondos se realiza precisamente para que durante todo este tiempo Gilmar pueda seguir pagando la pensión de su hijo, de tres años, y pueda también hacer frente al alquiler de su vivienda en Ibiza. Además, el dinero se destinará a sufragar algunos gastos de los acompañantes que se encuentran a su lado en Mallorca prestándole su apoyo y reforzando el trabajo de logopedia y rehabilitación que está haciendo Gilmar en el hospital.
El pasado 14 de enero, Sol Hale agradeció la buena acogida de la iniciativa y las numerosas muestras de apoyo y confirmó que continuaría con la recogida de fondos «para quien quiera seguir ayudando a Gilmar». Asimismo, aseguró que «el dinero extra» que se recaude con la iniciativa se guardará para que «Gilmar se mantenga hasta que pueda volver a trabajar». «Cuando tengamos una idea más clara de su camino de rehabilitación a largo plazo y su reintegración social y laboral y las ayudas sociales a las que puede optar, podremos hacer otra recogida de fondos para recaudar lo que se precise», concluye Hale.
En la plataforma de micromecenazgo, Hale proporciona algunos detalles biográficos de Gilmar, que hace más de diez años «decidió cambiar radicalmente su vida y viajar a Europa para empezar a enseñar capoeira».
Durante algunos años el brasileño residió en Segovia y después se trasladó a vivir a Ibiza. En la isla se le veía con frecuencia «tocar o bailar en Cala Nova».
