Tras la confusión inicial generada por la caída del turoperador, los hoteleros ibicencos señalaron que no se obligará a ningún turista de Thomas Cook a abandonar sus plazas. Todos ellos podrán concluir su periodo vacacional como tenían contratado, pero el regreso a su país sí puede ser distinto a lo previsto. Las autoridades británicas les proporcionarán vuelos de vuelta en otras compañías, si bien el horario puede variar, como también puede ser diferente el aeropuerto de llegada al Reino Unido.

Ahora bien, Thomas Cook no solo opera en Gran Bretaña, sino que también traslada turistas desde muchos países europeos, como Alemania, Holanda o Bélgica. En este caso, estas personas deberán buscar soluciones alternativas, al no hallarse bajo el paraguas de las autoridades británicas, explicaron fuentes hoteleras.

De este modo, el regreso de los turistas de Gran Bretaña en Eivissa que contrataron con el turoperador ahora quebrado se irá haciendo de forma paulatina y no están previstas aglomeraciones en el aeropuerto.

Las repatriaciones, que en todo el mundo afectarán a 150.000 personas perjudicadas por esta quiebra, están siendo organizadas por la Autoridad de Aviación Civil del Reino Unido (CAA, en inglés) y por el Gobierno de dicho país. No se incluyen los ciudadanos de otras nacionalidades.