La Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef) presentó ayer la sexta edición del Ibiza Cruising Shopping Map, un mapa en el que se sitúan diferentes comercios y rutas para que los visitantes que llegan en los cruceros al puerto de Ibiza se adentren en la ciudad para gastar en sus establecimientos.

Este año Ibiza recibirá 160 escalas de cruceros, dos menos que el año pasado. El primero llegó en febrero y el último lo hará en noviembre. La intención de la Pimeef es informar a estos visitantes de la oferta comercial y de restauración existente en la ciudad.

Según Joan Riera, presidente de la Asociación de Restauración de la Pimeef, en muchas ocasiones los «cruceristas brillan por su ausencia». «Muchas veces nos dicen que vienen cruceros y luego no sabemos dónde se meten. Con este plano lo tienen más fácil para adentrarse en la oferta de la ciudad», explicó Riera.

Por su parte, el director general de Turismo del Consell en funciones, Vicent Torres, aseguró que Ibiza tiene «mucho que ofrecer» y con la información que se les facilita a estos turistas con el mapa, «la escala en la isla es más satisfactoria».

La Pimeef ha editado un total de 50.000 mapas, 10.000 más que en 2018, que se distribuirán en julio y agosto. Como novedad, este año se ha colocado una caseta, junto a la estatua del pescador, como punto de información del City Boat. Se trata del servicio de barco que realizan dos empresas para llevar a los cruceristas desde el dique de es Botafoc al Martillo en el puerto de Ibiza, con precios de 2,40 euros en trayectos de ida y de cuatro euros en viajes de ida y vuelta. En la caseta se informa de los horarios de los barcos que navegan con una frecuencia de cada cuarto de hora.

Además, estos barcos también ofrecen otro servicio y llevan a los turistas a las playas de ses Figueretes, Platja d'en Bossa, es Canar y Santa Eulària.

En cuanto a la contaminación de estos buques, Torres explicó que desde el principio del mandato se ha trabajado para reducir el número de barcos amarrados a la vez. Este año, al revés que en 2018, no habrá ninguna escala en la que coincidan cuatro cruceros en el puerto de Ibiza.