Durante las intervenciones iniciales del juicio, el fiscal encargado del caso mantuvo que los acusados se encontraron con la víctima y comenzó «una trifulca» en la que el principal acusado propinó un «botellazo» en la cabeza de Garrido y le dejó semiinconsciente, momento que «aprovechó para robarle». «Se pueden imaginar cómo se siente esta familia», dijo el fiscal al jurado. «Celebraban tranquilamente el día de Navidad», pero «la mañana del 25 tuvo un fatal desenlace para sus vidas», señaló el fiscal. «Esta familia ya jamás podrá volver a celebrar la Navidad», añadió. El representante de la Fiscalía de Ibiza terminó ayer su alegato en la sala de juicios pidiendo al jurado que actúe «con base en la lógica y en el sentido común».