Así era el yate 'Irmao' incendiado en Formentera: un jacuzzi a bordo

En 2020 fue sometido a una reforma integral en la que se le hicieron retoques funcionales y estéticos

V.A.

El yate 'Irmao', que ardió y se hundió frente a la costa de Formentera, era un lujoso yate de 27 metros de eslora de los astilleros Astondoa botado en 1996 y que en 2020 fue sometido a una reforma integral en la que se le hicieron retoques funcionales y estéticos.

Destaca un impresionante jacuzzi exterior y una zona acolchada a su alrededor. Unas escaleras permitían el acceso a la plataforma de baño. El yate disponía demás de muchos juguetes acuáticos: 'tender' de 4,60 m con 50 CV, 'wakeboard', esquís acuáticos, 'donut' para tres personas, dos padle surf y equipo de 'snorkel'.

El salón disponía de una decoración elegante con generosos ventanales y puertas correderas integrales, así como un lujoso mobiliario y un sistema de entretenimiento de última generación.

La sofisticada zona de comedor contaba con elegantes sofás que invitaban a relajarse después de la comida. 

Siete camarotes

'Irmao' disponía de siete camarotes con capacidad para 12 personas. La suite principal, lujosa y elegante, disponía de una mesa de trabajo. Los dos camarotes VIP eran casi idénticos. Todos los camarotes, incluidos los cuatro de dos camas, tenían baños separados para garantizar la máxima privacidad de todos los invitados. 

 La embarcación ofrecía una tripulación de cuatro profesionales.