El presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, y el delegado de seguridad de la Delegación del Gobierno en Balears, Rogelio Araujo, lanzaron ayer, tras la sesión extraordinaria de la Junta de Seguridad Local, mensajes de tranquilidad a la población tras la alarma social generada por la última oleada de robos e incendios que ha sufrido la isla.
Ferrer dio un voto de confianza a las investigaciones que llevan a cabo los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado: «Esperamos tener resultados cuanto antes mejor, pero mientras tanto queremos transmitir un mensaje de tranquilidad a la población para que confíe en el trabajo que están realizando los cuerpos de seguridad del Estado».
Por su parte, Rogelio Araujo señaló que a la delegación del Gobierno «le preocupan» y le «ocupan mucho» los últimos sucesos y añadió que trabajan para «encontrar una solución».
Preguntado sobre las actuaciones concretas que está llevando a cabo la Guardia Civil o si existe algún refuerzo en la investigación, manifestó: «No podemos dar detalles de la investigación, pero sí pedir confianza y decir que hay los medios suficientes para llegar a solucionar y evitar» estos delitos.
Acabada la Junta de Seguridad, el gabinete de Comunicación del Ministerio de la Presidencia facilitó por correo electrónico los datos que se analizaron en dicha sesión extraordinaria, y que no dejaron indiferente a nadie.
Esos datos son genéricos y sólo ofrecen porcentajes, sin cifras concretas. Apuntan un descenso del 50,2% en el número de robos en el interior de viviendas hasta noviembre respecto al mismo periodo de 2016. Sin embargo, la propia nota reconoce: «Ante la alarma social generada por los robos de las últimas semanas, la Guardia Civil propone al Consell medidas para aumentar la coordinación y la presencia de agentes en la calle».
El presunto descenso de los robos choca con la alarma social que se vive en la isla y con la propia convocatoria de esta junta de seguridad a instancias del Consell.
Entre los tipos de delitos más frecuentes hasta el último trimestre del año, según el comunicado, figuran los de estafa bancaria y por compras en Internet, y se mantienen las asistencias en materia de violencia machista. Las infracciones penales bajan un 18,40% entre enero y noviembre de 2017 respecto al mismo periodo del año anterior, reducción que también se mantiene el pasado mes de noviembre (-2,44%), según la Guardia Civil. En estos primeros once meses ha aumentado un 6,38% el número de detenciones respecto al año anterior.
La Delegación del Gobierno y la Guardia Civil han puesto a disposición del Consell una batería de propuestas con el objetivo de incrementar «aún más los niveles de colaboración y coordinación entre las diferentes administraciones y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, encaminadas a rentabilizar su presencia en la vía pública».
