«Ibiza ha sido mi vida y mis ilusiones»

¿Qué significado tiene para usted la Medalla de Oro que le ha concedido la ciudad de Ibiza?

La verdad es que significa muchísimo más de lo que cualquier persona pueda imaginar. Estoy muy agradecido de que me hayan concedido esta medalla. No es que crea que me la merezco pero Ibiza ha sido mi vida, mis ilusiones y me gustaría que estuviera más guapa. Me da miedo que muera de éxito. La medalla es un reconocimiento, igual hay muchos que se lo merecen, por mantener un equilibrio en el mundo de la noche respetando siempre la esencia de Ibiza aunque parece que cada vez la ciudad es más dura, especialmente en la Avenida 8 de Agosto que soporta mucho tráfico rodado, coches y semáforos ... y tiene difícil arreglo.

Usted ya posee una medalla de oro de Turismo que le concedió el Ministerio de Turismo. ¿Cuál le ha hecho más ilusión?

Ésta, porque es de la raíz de donde estoy, aunque la otra también me hizo ilusión en su momento. Sin embargo la medalla de la ciudad de Ibiza me parece una maravilla. A mi siempre me ha gustado llamarle pueblo a Ibiza, me agrada más llamarle pueblo porque el término ciudad me parece una vulgaridad.

¿Qué es Ibiza para usted?

Son miles de recuerdos, momentos y sucesos, me gustaría vestirla de motivos atractivos como hicimos con el monumento al hippie que está ubicado en la Marina y se ha convertido en la postal más fotografiada del puerto desde que se instaló. Me encanta pensar en lo que correspondió a aquella Ibiza maravillosa que olía mal pero tenía un sabor especial.

¿Cuál es su rincón favorito en la ciudad?

No es la Avenida 8 de Agosto ni mucho menos. Me gusta mucho la ciudad vieja, pero la uso poco porque es complicado llegar hasta ella. Hoy me entregan la medalla en el baluarte de Sant Pere, un sitio precioso del conjunto del Patrimonio. Pienso que aún habría que darle más importancia a este patrimonio y modificar un Paseo Marítimo que se ha hecho fatal.

¿Tiene algún lugar donde se tomaría una cerveza antes de coger su barco e irse a navegar?

El rincón más bonito para mi es la zona del Mercado Viejo, donde está el Croissant Show y las puertas de entrada a la muralla. No entiendo porqué sacaron el Mercado Viejo de ese rincón, era a donde iba a comprar la fruta y la verdura, esos rincones son para mi la esencia de Ibiza. Me acuerdo también del bar Mariano que tenía las cucharas agujereadas. Aquella Ibiza de puerto de mar y de piratas tenía mucha gracia. El mundo ha crecido a través del mar y la ciudad de Ibiza crece a través de un puerto. El mundo del navegante siempre ha sido un mundo aventurero y como dice Serrat ´Navegante no hay camino´. Ibiza es hoy en día es un referente mundial como destino.

¿Qué le enamoró de Ibiza para haberla llevado como bandera por todo el mundo?

Me gustó el ibicenco porque es muy permisivo, le daba igual lo que hicieran y participaba en lo que le gustaba. El mar no ha sido su mundo, lo era más su tierra, su campo, el carro con los caballos y las mulas. Me encandiló esa isla de carros, trenzas, campo y mar.

Usted planteó una iniciativa plástica y medioambiental para la ciudad con su idea de plantar ´Entre todos mil palmeras´

Tuve la iniciativa pero me quedé en 58 palmeras, pero sigo con la idea en mente y ahora he encontrado un señor que tiene palmeras y me enterado que las vende. Quiero comprar esas palmeras porque me gustaría maquillar lo feo del extrarradio de Ibiza Me da mucha pena cuando la gente viene de visita y me comenta lo fea que es la zona de las afueras de la ciudad.

¿Cómo le gustaría arreglarlo ahora que tiene más tiempo?

Tenemos que tratar de decorarla, camuflarla y querer más el entorno de la ciudad. Había que erradicar todas las vallas, en la Comunidad Europea está prohibido tener vallas y aquí hay cada vez más. Tenemos que contribuir a embellecer y cuidar la isla con la participación de todos y yo voy a seguir contribuyendo ahora que tengo tiempo libre. Hay camiones tirados por todos lados y hace muy feo.

¿Ha pensado como contribuir a ello?

Si tengo que poner dinero lo haré y montaré una oficina para arreglar la isla. He trabajado toda la vida y estar parado me aburre. He pensado en ayudar a vestir Ibiza, ya que hoy por hoy es el sitio de moda en el mundo. La gente se decepciona cuándo viene y me gustaría que todo el mundo quedara sorprendido de la ciudad. No hay que olvidar que esto hoy es moda y pasado mañana deja de serlo, hay que tomar conciencia de ello.

¿Le cautivan las mismas cosas de la ciudad?

Me gusta la gente, especialmente los ibicencos de antes y todos aquellos refugiados que llegaban de todas partes del mundo para esconderse aquí de las guerras, ese mundillo tenía mucha gracia. También el mundo de Smilja Mihailovich, Elmyr de Hory y su pintura. Todo aquello que ahora está confundido en una isla que merece estar mucho más cuidada y mimada.

¿Donde se siente a gusto?

Soy muy de campo y playa, me gusta mucho el puerto, me agradaría que se rectificara lo hecho porque no tiene ninguna gracia. Tenía más encanto con los bares del puerto. Me gusta algo desde donde pueda divisar el Patrimonio, por ejemplo Sa Calma en Marina Ibiza, un sitio maravilloso y precioso.