Coyuntura

La economía española repunta a final de año y lleva al PIB a crecer el 2,5% en 2023

La actividad productiva tuvo un repunte del 0,6% en el cuarto trimestre por la mejor evolución del consumo de los hogares

Un buque portacontenedores atracado en el Puerto de Barcelona (1 de abril de 2021).

Un buque portacontenedores atracado en el Puerto de Barcelona (1 de abril de 2021). / EP

Sara Ledo

La economía española cogió impulso en el cuarto trimestre del año con un avance del 0,6% respecto al trimestre anterior, marcada por la buena evolución del consumo privado y las exportaciones. El dato, que no será definitivo hasta el 26 de marzo, lleva al PIB a crecer el 2,5% en 2023, la mitad de lo que lo había hecho el año anterior (5,6%), etapa que estuvo marcada por la recuperación de la actividad tras la pandemia, según las cifras de Contabilidad Nacional Trimestral publicadas este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE),

En un escenario marcado por la ralentización económica en toda Europa y la subida de la inflación y los tipos de interés, España creció el año pasado muy por encima de las principales economías de la zona euro --Francia (1%), Alemania (0,4%) e Italia (0,8%)-- que avanzaron un 0,6% de media. Y lo hizo, además, una décima más de lo previsto por organismos como el Banco de España o la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), e incluso el propio Gobierno, que auguraban un alza del 2,4% en sus últimas estimaciones.

"Estamos demostrando desde el Gobierno que es posible conjugar crecimiento económico, creación de empleo y medidas destinadas a la protección social y al bienestar de ciudadanos hogares y empresas", ha celebrado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en un vídeo. La sorpresa del repunte del 0,6% a final de año, que interrumpe la senda descendente de los trimestres anteriores --la economía avanzó el 0,6%, el 0,4% y el 0,3% en el primero, segundo y tercer trimestre, respectivamente-- lleva al Ejecutivo a mantener su optimismo de cara a este 2024, con una estimación del crecimiento del 2%, de nuevo por encima del resto de países de la euro zona. Este mismo martes el Fondo Monetario Internacional rebajaba esta estimación al 1,5%, pero aún así por delante del resto de grandes economías.

La demanda nacional contribuyó en 1,7 puntos al crecimiento del PIB de 2023, lo que supone un retroceso de 1,2 puntos respecto al año anterior. Mientras, la demanda externa presentó una aportación de 0,8 puntos, lo que supuso 2,1 puntos menos que en 2022. El valor del PIB a precios corrientes para el conjunto del año 2023 se situó en 1.462.070 millones de euros, un 8,6% superior al de 2022.

En tasa interanual, el PIB del cuarto trimestre de 2023 creció un 2%, lo que supone una décima más que en el trimestre precedente (1,9%), debido exclusivamente a la aportación de la demanda interna.

Cae la inversión

Entre los componentes del crecimiento del último trimestre, destaca una caída de la inversión (formación bruta de capital fijo) del 2% respecto a los tres meses anteriores, principalmente debido al descenso del 5,2% en la inversión en maquinaria y bienes de equipo. El Gobierno atribuye este retroceso a la "contabilización" de la contribución del Plan de Recuperación que prevén que revierta durante este año. "Pensamos que hay parte de los fondos (europeos) que ya han llegado a la economía pero se van a recoger en la contabilidad con un cierto decalaje", ha precisado el secretario de Estado de Economía, Israel Arroyo, en una rueda de prensa para analizar los datos de la coyuntura económica.

En el lado bueno, además del crecimiento del 0,3% del consumo de los hogares, destacan el impulso de las exportaciones (2,9%), a mayor intensidad que las importaciones (2,7%) después de dos trimestres de retrocesos en ambos casos.

Por sectores, todos los grandes sectores de actividad presentaron variaciones positivas respecto al trimestre anterior. El valor añadido bruto de las ramas industriales aumentó un 2,4%, con una tasa del 1,1% en el caso de la industria manufacturera. Mientras, la agricultura, ganadería y pesca creció un 5,3%; la construcción un 0,6% y los servicios un 0,2%. En este último caso, el mejor comportamiento del trimestre fue el de información y comunicación (4,5%) y educación y sanidad (2,9%), mientras que el peor fue el de actividades artísticas y recreativas (7,4%) y financieras (7,3%). Comercio y hostelería retrocede un 0,4%.

Empleo y horas trabajadas

El número de horas efectivamente trabajadas aumentó un 2,8% interanual este trimestre, nueve décimas más que en el precedente, con un crecimiento interanual del 0,7%. Por su parte, la productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo registró este trimestre una tasa interanual del -1,8%, y la productividad por hora efectivamente trabajada del -0,8%. En términos intertrimestrales ambas tasas fueron del -0,1%.

Preguntado por la reducción de jornada propuesta por el Gobierno de coalición, Israel Arroyo ha defendido que trabajar 37,5 horas a la semana "no tendría por qué afectar a la productividad" y ha recordado que muchos convenios ya recogen una reducción de las horas máximas. "Lo más importante es que las empresas y los trabajadores tengan la flexibilidad suficiente para adaptar los distintos elementos que influyen en una relación laboral", ha añadido.