CaixaBank gana 3.659 millones hasta septiembre y ya supera en un 16% el beneficio de todo 2022

El alza de los tipos oficiales impulsada por los bancos centrales para combatir la inflación sigue disparando los beneficios de los bancos. CaixaBank ganó 3.659 millones de euros entre enero y septiembre, un 48,2% más que los 2.469 millones del mismo periodo del año pasado. El banco, de hecho, ya ha ganado en nueve meses un 16,3% más que los 3.145 millones del conjunto de 2022. Su resultado final de 2023, así, podría acercarse al máximo histórico de 5.226 millones que obtuvo en 2021 gracias a los beneficios extraordinarios que le aportó absorber Bankia a un precio inferior a su valor contable (sin ello, el resultado recurrente de aquel ejercicio fue de 2.359 millones). 

La mejora del beneficio de los tres primeros trimestres del año se basó principalmente por un margen de intereses (diferencia de ingresos por lo cobrado por el crédito y lo pagado por los depósitos) que se disparó un 60,7%. Como el resto de entidades, CaixaBank está elevando lentamente la remuneración que paga a sus clientes y beneficiándose del alza de lo que les cobra: su margen de clientes (diferencia entre el tipo medio de los créditos y los depósitos) ha pasado en un año del 1,82% al 3,52%, con el tipo medio de los préstamos ascendiendo del 1,84% al 4,23% y el de los depósitos del 0,02% al 0,71%.

La mejora de los ingresos bancarios básicos, junto con la del resultado del negocio directo de seguros (21,2%) y las participadas aseguradoras (47,6%), han más que compensado la caída de las comisiones (-5,3%). El 'impuesto' a la banca (373 millones de euros) provocó que la subida de los ingresos totales se moderase al 28,9%. Sin embargo, un incremento de los gastos (5,2%) y las provisiones (39%) más bajo favoreció que el resultado antes de impuestos repuntase un 56,5%. El mayor pago del impuesto de sociedades al no ser deducible el gravamen a la banca (79,5%) explica que la mejora final del resultado fuese del 48,2%.

Rentabilidad razonable

En un contexto en que los fuertes crecimientos de los beneficios bancarios vuelven a estar en el foco, tras el pacto alcanzado por PSOE y Sumar para hacer el 'impuesto' a la banca permanente en lugar de temporal, el banco participado por el Estado se ha anticipado a las posibles críticas. "La solidez financiera y una rentabilidad razonable permitirán a CaixaBank ofrecer una retribución adecuada a los accionistas, los principales la Fundación La Caixa y el Estado a través del FROB, seguir con su compromiso de apoyo a la economía, familias y empresas, y desarrollar su función social", ha defendido.

El banco, en esta línea, ha destacado que ha concedido más de 250.000 operaciones de financiación en lo que va de año, está gestionando alrededor de 6.000 solicitudes de clientes que han pedido su adhesión al Código de Buenas Prácticas hipotecario, y ha acordado cerca de 10.600 acuerdos de refinanciación a particulares y 9.800 novaciones de tipo variable a tipo fijo desde que empezaron a subir los tipos. También ha resaltado que cuenta con casi 11.000 viviendas sociales y tiene alrededor de 360.000 clientes con cuentas sociales o básicas. 

"Este resultado permite mejorar la rentabilidad sobre fondos propios tras muchos años de bajos retornos. Sin duda, una gran noticia para nuestros más de 600.000 accionistas y en particular para la Fundación La Caixa y el FROB, que recibirán un mayor dividendo. Y, sobre todo, nos permitirá seguir apoyando a nuestros clientes, empresas y familias, y a la sociedad en su conjunto", ha abundado su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, en una nota distribuida por la entidad.