El rider ibicenco Mariano Marí inicia su última temporada en la categoría sub-23 de MTB Enduro con la mirada puesta en la Copa del Mundo, donde aspira a colarse entre los 40 mejores especialistas del circuito internacional.
Tras proclamarse subcampeón de España tanto en la cita nacional, que tuvo lugar en Canarias el pasado mes de agosto, como en el Open de España de la disciplina, tras la disputa de cinco pruebas puntuables, el deportista del Portinatx Cycling Team pretende acceder por la puerta grande a la categoría elite, división en la que fue el séptimo mejor clasificado a nivel nacional en 2018.
El joven biker de Sant Joan comenzó a mejorar su nivel competitivo desde que hace tres años se marchara a Barcelona a estudiar Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Sus buenos resultados en copas catalanas y circuitos nacionales le han permitido contar con patrocinadores que le ayudan con el material y la inscripción en las carreras, donde se está labrando un futuro en esta modalidad, que recientemente ha ingresado en la Unión Ciclista Internacional (UCI).
Según explica Marí, el Enduro dentro del mountain bike es una especialidad «con un recorrido marcado con entre cuatro o seis bajadas cronometradas». «Sólo se puede entrenar un día antes sobre el circuito y luego en la carrera lo principal es la técnica. La exigencia física es alta porque son bajadas bastante técnicas y, aunque las subidas son lentas, tienes un tiempo establecido y las jornadas pueden irse a las cinco o seis horas. Son días largos de montaña», argumenta el deportista ibicenco, que practica esta disciplina desde los 12 años brincando en pequeños circuitos montañosos de su Sant Joan natal. «Lo que más me atrae del Enduro son los saltos, la adrenalina y el componente de cómo se ve desde fuera la naturaleza. Es un deporte impactante y espectacular», describe Marí, que gracias a su pasión ha podido conocer todos los rincones de la zona norte de la isla, «ideal para entrenar esta modalidad».
Objetivos en 2019
Sus objetivos de cara a esta temporada, que abrirá el próximo mes en Palma, pasan por «intentar mantener el puesto de subcampeón de España» de su división y por «mejorar el rendimiento» en la Copa del Mundo, donde su mejor posición a nivel absoluto ha sido un 65. Este año, como novedad, tiene previsto debutar fuera de Europa en las dos pruebas que tendrán lugar en Canadá y EEUU. Además, intentará tomar parte en cuatro de las seis citas europeas del mundial. También tiene subrayado en el calendario el 23 de junio, con Vigo como escenario del Campeonato de España.
«Lo que me dio el salto de nivel fue salir de la isla y ser capaz de competir en más carreras, porque la experiencia es muy importante. Aprendes mucho y te da confianza. En Ibiza estaba un poco limitado, salir fuera y ver el nivel de la gente te hace abrir los ojos», subraya el corredor, que tiene como gran desafío «llegar a entrar en un equipo oficial de una marca importante».
Mariano Marí convive con las caídas, aunque no suele irse muchas veces al suelo. Es un biker ambicioso pero seguro y sólo ha tenido que lamentar varios esguinces, un golpe en la cabeza y una fractura en la muñeca. Nada que consiga frenar a una de las grandes promesas del mountain bike ibicenco juno a Mateo Tur, que con 21 años es su gran compañero de aventuras. «Tiene un año menos que yo y en Ibiza sólo podemos apretarnos uno a otro. Es mi mejor compañero y tiene un buen nivel», concluye Marí.
