Sergio Castel, jugador de la UD Ibiza, manifestó que el empate conseguido ayer ante la Peña tenía «sabor amargo» porque ellos siempre van a ganar, y más jugando en casa. «Ellos al final también se están jugando la vida y han salido un pelín más enchufados, pero yo creo que hemos hecho un buen partido, pero satisfechos no nos quedamos», dijo el atacante, que se mostró feliz por el gol que marcó, sobre todo porque sirvió para «ayudar» a su equipo.

Por su parte, el defensa Rubén, se conformó con la igualada: «Un puntito, sumamos. Queríamos sacar los tres, pero no ha podido ser y ahora toca pensar en el siguiente partido contra el Villarreal B». El zaguero aseguró que el duelo ante la Peña fue «igualado».