Los padres de Albert Lluc le tenían preparado ayer un plan dominical sorpresa muy especial: hacer panellets acompañado de otros pequeños amantes de la cocina en el aula de Es Graner de Can Coves. Este mini pastelero de «cinco años y medio» no cabía en sí de gozo cuando descubrió que iba a aprender con expertos reposteros cómo se elaboran estos dulces típicos de Cataluña y Balears que tanto le gusta comer por Todos los Santos.

Al taller acudieron otros 29 niños entre los cinco y los 12 años, algunos animados por sus padres, otros, por iniciativa propia. Trabajaron divididos en cuatro grupos, según la edad, acompañados cada uno por un repostero, Xicu Planells, Esther Suárez, Marga Orell y Estela Riera.

Ana Mariblanca Bonet, de seis años, ya tenía experiencia anterior, adquirida en su colegio de Sa Real, dando forma a los panellets, pero ayer tuvo la oportunidad de participar en todo el proceso de elaboración de los dulces. Ataviada con un simpático delantal de búhos, la pequeña disfrutó con cada paso. Lo único que le pareció más complicado fue «rallar el limón».

«Hemos fusionado para esta ocasión la receta de los abuelos que seguimos en Can Coves con la de la familia de Xicu Planells, que es de Can Xicu Mussón», explicaba Estela Riera. Según esta receta tradicional, a la masa, además de harina de almendra, azúcar, huevo, ralladura de limón y canela, se le añade también patata cocida o boniato. Algunos grupos optaron ayer por mezclar los dos tubérculos, como en el caso del capitaneado por la repostera Esther Suárez, y otros prefirieron usar sólo boniato, como el de Marga Orell. «Hay obradores de Cataluña que consideran un sacrilegio emplear boniato o patata, pero nosotros creemos que estos ingredientes hacen los panellets más jugosos», comentaba Riera tras concluir el taller.

En total, en algo más de hora y media, los pequeños reposteros prepararon unos trescientos panellets, no sólo de piñones, sino también de almendra, coco y chocolate, el que tuvo más éxito.