Por primera vez he visto a un Biel Barceló, abatido, casi sin palabras, dando la impresión que todo esto ya le rebasaba y que era demasiado para él y que ha debido dimitir. Como intuía, la presidenta Francina Armengol no cesó al vicepresidente Biel Barceló, al final él presentó la renuncia a su cargo en el Govern y muy posiblemente incluso deje el escaño en el Parlament balear. O sea que políticamente deja absolutamente todo.Dentro de lo malo para el Govern, esto no cabe duda de que puede significar, al menos cuatro cosas positivas para Armengol, además de aprovechar y realizar alguna remodelación de su equipo.

1º) Ha venido a ser un borrón y cuenta nueva al desgaste actual, dando algo de oxígeno.

2º) A la vez que ha posibilitado la entrada de una cara nueva (también ha sido de Més y no un independiente como se barajaba) que, por supuesto está completamente limpia de cualquier duda y esto ya sería bueno después de tanto desgaste por, no grandes cuestiones, pero si por conductas no éticas.

3º) En las últimas semanas Francina Armengol no quería ni hablar de que Podemos pudiera entrar en el Ejecutivo Balear, y la presidenta ha tenido oportunidad de cerrar esta crisis, dando algún responsabilidades de gobierno a los miembros de Podemos Balears.

4º) Indirectamente, el hecho de que los podemistas hubieran entrado a formar parte de este Govern, podía haber hecho que la presidenta se asegurara un tramo final tranquilo de año y medio (hasta las elecciones) en donde sus ´socios´ de Podemos no le pusieran trabas a cuestiones de tipo urbanístico, medioambiental o social, o sea, habría habido paz y menos disputas en el Parlament.