n La consellera de Movilidad del Consell de Ibiza mostró ayer su confianza en que algunas de las medidas previstas para esta temporada sirvan para reforzar la lucha contra el intrusismo en el transporte, como la apertura de una oficina de atención ciudadana de la Guardia Civil en el aeropuerto, donde se concentra una parte importante de los piratas durante el día. Además, la Benemérita y el Ayuntamiento de Sant Josep «se han comprometido a trabajar de manera coordinada y a tener mayor presencia policial en este recinto», destacó la consellera.

Otras medidas señaladas por Marí son el aumento de diez efectivos con que contará la plantilla de la Guardia Civil de Tráfico para el verano, el refuerzo en las inspecciones del departamento de Transportes del Govern balear, «que irán acompañados de guardias civiles venidos expresamente para estas actuaciones», o «la formación y la jornada de trabajo conjunta para coordinar las policias locales con los inspectores del Consell».

No obstante, Marí lamentó que el propio funcionamiento de la legislación española impide que los inspectores del Consell puedan actuar contra los taxistas piratas que se anuncian a través de las redes sociales de Internet. Además, «para multarlos se necesita demostrar in fraganti que se ha hecho una contratación y habría que cubrir legalmente a nuestros inspectores para poder actuar», ya que estos no pueden intervenir llamando directamente a uno de estos intrusos porque la ley les obliga a identificarse previamente para que sea un acto válido.