Comerciantes de Cala Vedella expresaron ayer su indignación por el hecho de que el Ayuntamiento realice obras de canalización en plena temporada turística en este núcleo, y concretamente en primera línea de playa.

Ayer por la mañana los operarios abrían una acequia en la calle Castelldefels para instalar la nueva canalización. Una de las comerciantes afectadas, Antonia Riera, se quejó de las consecuencias de estas obras, que le impedían incluso acceder a su negocio. «Lo más grave de todo es que nadie nos había avisado de esto», afirmó Riera, quien denunció los hechos a la Policía Local y a la Guardia Civil.

El Ayuntamiento, por su parte, aseguró que las obras terminarían ayer mismo y que se eligió el día de ayer para realizarlas a petición de un grupo de comerciantes, puesto que inicialmente iban a realizarse el pasado fin de semana.