La Alianza Mar Blava ha puesto en marcha una campaña de micromecenazgo para recaudar fondos para financiar todas las acciones que lleva a cabo en contra de las prospecciones petrolíferas. A través de su página web los ciudadanos pueden «adoptar un metro de mar», con un coste de 10 euros (por cada metro y se puede pagar a través de tarjeta o el sistema paypal) y que se acredita con un diploma en el que se especifican las coordenadas del trozo de mar adoptado, que «no comprado», para su preservación, según Ángeles Nogales, una de las portavoces de la Alianza Mar Blava.

Aparte de la recaudación, el enlace de la web a través del cual se puede adoptar un metro de mar contiene una valiosa información sobre las especies que se pueden encontrar en el Mediterráneo y a qué profundidad. Cuando se llega al fondo se puede concretar la ayuda. Este programa se divide en tres zonas: el canal de los cetáceos, donde se pueden hallar desde el rorcual común hasta el tiburón blanco y es la parte más sensible a las exploraciones sísmicas, según Flor Dell´Angnolo, otra portavoz de la alianza; las praderas de posidonia y el canal de Menorca.

Nogales destacó que, además de sensibilizar, esta campaña de micromecenazgo puede ser «un perfecto regalo de Navidad». Hasta ahora, la Alianza Mar Blava se ha gastado 70.000 euros en sus actividades contra las prospecciones con fondos procedentes de donaciones de empresas y particulares y las administraciones. Para el año que viene se prevé un presupuesto de 85.000 euros, pero «asusta» que, en el caso de que la declaración de impacto ambiental de las prospecciones en el Golfo de Valencia no fuera negativa, se tendrá que acudir a los tribunales, acción cuyo coste será «mucho más elevado a lo hecho hasta ahora».