Varios empresarios de Platja d´en Bossa con negocios situados en la parte de la playa que pertenece al municipio de Ibiza (hasta el hotel Algarb) denuncian pérdidas económicas porque el Ayuntamiento no ha retirado la posidonia acumulada sobre la arena. Jaime Bonet, trabajador del restaurante Mil Flores y de Bio Beach denunció ayer, en representación de estos establecimientos –el restaurante Casa Manolo, Buena Onda Café y Beach Bistro Jd´s–, que el «olor insoportable» causa que los turistas se desplacen a disfrutar de esta playa a la zona del municipio de Sant Josep.

Según estos empresarios, se está produciendo una discriminación, puesto que Vila ha limpiado las otras playas del municipio (Talamanca y ses Figueretes), con el consiguiente beneficio para los comerciantes de esas zonas, mientras los turistas pasan de largo delante de sus negocios.

El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ibiza, Joan Rubio, que a finales de abril anunció que las máquinas retirarían la posidonia de Platja d´en Bossa a principios de mayo, no respondió ayer a las llamadas de esta redacción.

El regidor explicó hace tres semanas que los temporales del invierno y la primavera, con viento de levante, han llevado gran cantidad de ´algas´ (como popularmente se denomina los restos de esta planta marina) hasta el principio de Platja d´en Bossa. Las previsiones meteorológicas indicaban que en Semana Santa se podían producir más temporales, por lo que el Consistorio decidió retrasar unos días la retirada de la posidonia. Finalmente, los operarios aprovecharon el derrumbe de una piscina para quitar los restos de este vegetal marino acumulados en ses Figueretes, que también se retiró en Talamanca.

Rubio justificó entonces que aún haya restos de la planta en Platja d´en Bossa porque están situadas en la zona en la que se ha perdido más arena y recordó que la posidonia ayuda a evitar la erosión. El Ayuntamiento ha colocado carteles y ha desarrollado campañas informativas para explicar a los turistas y a los residentes la importancia medioambiental de la posidonia.

El Ayuntamiento de Sant Josep también hace hincapié en la relevancia de la planta marina para el entorno, ya que atenúa la fuerza de las olas y retiene la arena, con lo que ayuda a la conservación de las playas. Este es el motivo por el que no se quita en invierno.

Sin embargo, el Consistorio josepí retira la posidonia para que las playas estén libres de ´algas´ desde antes de Semana Santa hasta octubre, para que los turistas puedan disfrutar de ellas. Para ello, el Ayuntamiento emplea maquinaria pesada: camiones con pinzas para cargar los restos, nivelar la playa y enterrar parte de la planta y camiones para transportarla hasta los puntos de acopio (a final de verano se devuelve a la playa). Cuando se acumula mucha posidonia los operarios utilizan una máquina retro-giratoria para retirar la posidonia donde no pueden acceder los camiones.

Recomendaciones de la conselleria

La conselleria de Medio Ambiente del Govern balear no interviene directamente en la retirada de la posidonia, competencia que corresponde a los municipios. Sin embargo, sí ofrece asesoramiento sobre los criterios medioambientales que se deben utilizar a los ayuntamientos que lo solicitan, como ha hecho el de Campos (Mallorca) para retirar los restos de la planta marina acumulados en la playa de es Trenc.

El Consell de Ibiza, por su parte, encargó un informe al geógrafo Xisco Roig, que se presentó en noviembre de 2010, basado en el volumen de recogida de posidonia de 2008. Los datos recopilados indicaban que el 67 por ciento de las plantas marinas que se tiraban al vertedero de Ca na Putxa o a otros lugares era en realidad arena. Hace tres años se arrojaron 10.000 toneladas de restos de posidonia, de las cuales casi 6.800 eran «arena pura», según explicó entonces el conseller de Medio Ambiente, Albert Prats.