Una treintena de fotografías captadas durante una travesía de cien días en una barca de remos por el río Mekong inaugura el remodelado Centro Cultural Can Curt de Sant Agustí.

El protagonista de esta aventura, Ibán Álvarez, es un viajero experimentado con miles de kilómetros en su mochila que decidió recorrer los 2.400 kilómetros del río asiático.

Tras la rehabilitación efectuada en el Centro Cultural Can Curt de Sant Agustí des Vedrà, el Ajuntament de Sant Josep de sa Talaia reanuda así su actividad expositiva con 'Los días del Mekong'.

La exposición, que se inaugurará el jueves 25 de noviembre a las 18.00 horas y se podrá visitar de jueves a domingo de 18.00 a 21.00 horas hasta el día 5 de diciembre.

La ruta

Apoyado por la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Sant Josep de sa Talaia y por la empresa Riumar, Álvarez emprendió una aventura que inició en la aldea Xieng-kok en Laos, donde está la primera carretera que le permitía transportar a Meky, su barca de remos, hasta el río. Continuó por Birmania, Tailandia, Camboya y Vietnam.

"El 80 por ciento de la gente que conocí no habían visto nunca un extranjero", ha explicado Ibán. El fotógrafo cederá algunas de las imágenes para que sean sorteadas entre los visitantes que deseen participar y cuyos beneficios, a propuesta de la concejala de cultura Maria Ribas, irán destinados al proyecto Suport a l´educació de nens de l´ètnia Batwa-Rwanda -etnia de pigmeos que se encuentran en una situación de marginación y menosprecio por el resto de la sociedad- de la Fundació Concòrdia.

Anécdotas

"Apenas había navegado diez kilómetros cuando tuve que detenerme en un paso estrecho a causa de la sequía que ha provocado una gran disminución del caudal, para esperar que unas enormes barcazas de carga que estaban remontado el río pasaran. Una de estas barcas, de bandera china, se acercó a Meky y en el lenguaje universal de los signos me explicaron que unos kilómetros más abajo había un control del ejército Birmano. Dada la tensa situación política del país, parece que un extranjero con cámara, solo en una barca no tenía muchas oportunidades de salir airoso de la situación, y eso en un país donde la vida no vale mucho no es muy alentador", ha recordado.

Los chinos cargaron a Meky en su barcaza e Ibán se volvió a encontrar en el punto de partida. De nuevo en Xieng-kok, otra barca aceptó transportarle río abajo hasta pasar el control Birmano, y por fin pudo iniciar su viaje.

En otra ocasión chocó con la barca de un pescador, hay que tener en cuenta que toda la travesía la realizó de espaldas. El pescador, enfurecido, atrapó con un cabo a Meky y arrastró de nuevo a Ibán hacia la peligrosa costa Birmana.

Tampoco se salvó de quedar ingresado una semana en un hospital por una dolorosa infección en los pies que le impedía caminar.

Para conocer más detalles de su aventura o ver más fotografías pueden también visitar el blog que escribió durante su viaje en viajealmekong.blogspot.com.